Alondra. El inicio del cierre.

17 3 0
                                    

No podía creer que Zaira me dejara sin una explicación, pero no esperaba que me dejara de hablar por haber vuelto con su ex novia de la adolescencia. Quiero y necesito que de su boca salga una explicación a su desinterés y su crudo distanciamiento.

Llamé a mi abuela en cuanto Lala y Bianca dejaron mi casa. Ella me daría una explicación... o eso esperaba obtener de ella.

- Hola, la más hermosa de mis nietas!!!.

- Soy la única nieta que tenes. Dile a tu sobrina que conteste mis llamadas.

- Alondra ya te dije que no me metería en sus asuntos.

- Perfecto...Tampoco me podes decir si ella está en pareja con Natalia, o quién sea?.

- Te recuerdo que Natalia es su abogada por qué vos se la recomendaste!...No, no esta con ella..- Escucho el suspiro de mi abuela a través del teléfono.- Alondra, Zaira no está pasando por un buen momento. Comprende que necesita alejarse para.

- Abuela, si algo sé es leerte entre líneas. Vos le has pedido qué se aleje de mí?. Es por el juicio?.

- Yo te preguntaré una cosa... Cuándo tomaste la decisión de reanudar tu tratamiento, has pensado en mi sobrina, en cómo se tomaría la noticia qué no la incluías?.

- Abuelaaa!.

- Alondra, ella tomó una decisión, así cómo vos tomaste otra. Comprendo tus ansias y nadie puede ir en contra de lo que soñamos cuando es un deseo tan poderoso, pero debes respetar su decisión, así como ella respeta la tuya.

- Yo no le pedí que me dejara.

- Le has dado otra opción?..- Chasquea su lengua.- Pensaste en vos, y está perfecto, ahora considera correcto su alejamiento. Zaira necesita ordenar sus cosas y por fin hará justicia por la muerte de sus padres. Creo que deberías de ponerte en su lugar un poquito.

- La extraño abuela...me manejé muy mal, no pensé en las consecuencias, solo pensé en mi...

- Ya tenes la respuesta. Deja que ella te envíe un mensaje cuando crea prudente volver a verte. El tiempo lo dirá.

- Ok...- Unas lagrimas caen de mis ojos.- Solo, le podes decir qué...nada. Descansa, mañana hablaremos.

- Sí...Te quiero mucho, trata de cuidarte y no te mortifiques. Hablaremos mañana.

- Chau.

- Chau.

Lloro abrazando el suéter que Zaira se olvidó de meter en sus cajas, cuando le pidió a Lala buscar las cosas que ha dejado en mi casa...Bueno, no se lo olvidó, yo lo tomé de la caja. Quería conservar a algo suyo y ese suéter conservaba su olor. Jamás había hecho estas cosas, pero su olor me daba tranquilidad, además de que me ayudaba a dormir mejor pensando que aun ella duerme junto a mí en la cama.

* * *

Ni su suéter, ni el imaginar que ella compartía junto a mi, en mí cama, me ayudó a dormir y acallar todos mis pensamientos.

Durante todo el día pensaba en cómo haría para que Zaira me escuchara y pueda darle explicaciones, y ella me de las suyas. En mi mundo, lo lógico hubiera sido que ella me dijera frente a frente las razones por las que prefirió alejarse, para no saber más nada de mi. Por otro lado, creo yo, que al menos me hubiera dicho: No quiero continuar con vos porque decidiste practicarte un tratamiento que cambiará tu vida y no tomaste en consideración si yo estaba de acuerdo.

Huye...De Mi. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora