Llevo semanas sintiéndome molesta, incomoda y podría decir que cargo con altos niveles de frustración. Empezando por el embarazo de Bianca. Amo que mis amigas hayan logrado cumplir con su sueño de convertirse en madres; estoy muy contenta por ellas me hace mucha ilusión formar parte de este gran paso en sus vidas. El problema es que no resolví mis heridas, tengo miedo que algo malo suceda y ellas pasen por lo mismo que he experimentado. También esta mi frustración por mi maternidad trunca. No puedo, ni es correcto hablar de maternidad con Zaira cuando recién estamos comenzando nuestra relación. Ya me costó horrores que ella quiera mudarse junto a mi y que no sintiera que estamos acelerando las cosas. Después, creo que es lo más importante, los conflictos con Domingo Moretti y mi padre. Exactamente un mes desde que iniciaron una absurda guerra con mi novia y mi abuela Rosa. Estoy en el ojo del huracán, amortiguando los fuertes vientos con artillería pesada. Domingo cree que con dinero baila el mono, y no lo culpo, he visto con mis propios ojos a personas negarle la compra de sus acciones y ceder, lo que tanto atesoraban, a cambio de grandes sumas. El conflicto que no toma en cuenta, mi ex jefe y mi progenitor, son los enormes carteles de peligro. Sí, ellos definitivamente son adictos a la adrenalina, saben dónde han puesto sus manos y quieres las sostienen a través de los hilos, que sujeta con sus manos firmes, como las marionetas que son. Ellos se creen intocables y poderosos. Solo espero estar preparada para lo que se avecina, y nada bueno saldrá de todo esto.
- No te falta más nada?.
- No...A qué hora te ves con tu abuelo?.
- En..- Miro la hora en mi teléfono.- Conociendo a ese viejo, seguro en un cuarto de hora lo tenemos acá.
- Tiempo suficiente para que me cuentes... Qué está sucediendo contigo?.
- Lala, por qué siempre estás preocupada por mi?, deberías estar centrada en lo que come tu esposa y no!, en mis caras.
- Tu me preocupas por qué te quiero, o acaso cuándo te cuento mis inquietudes y mis molestias a ti te molesta escucharme y ayudarme?.
- No.
- Bueno, habla de una buena vez.
- Juntaré a Zaira con el idiota de mi padre, no te parece que tengo motivos suficientes para tener esta cara de cucu.
- Sí, y qué más?.
- Comprendo por tu expresión que.
- Alondra!!.
- Ok, me conoces mejor que yo...- Chasqueo mi lengua y desvío mi mirada de sus fulminantes ojos claros penetrantes.- Hace días que no dejo de pensar en cosas que no ayudan.- Lala estaba por hablar pero me adelanto.- Llego a casa y soy recibida con mucho amor, y eso es o debería de ser un motivos más que suficiente para dejar de pensar en esas cosas que varios conflictos ha traído a mi vida y existencia. Pero no!, yo tengo que continuar pensando en ello, arruinando lo hermoso que estoy viviendo con Zaira por pensar en.
- En volver a ser mamá...- Miro rápidamente a mi amiga.- y tienes miedo de hablar esta incertidumbre con tu novia.
- En parte, pero no es una incertidumbre.. Lala ya no tengo edad para ser madre.
- No digas eso, tu sabes que no es así.
- Más allá de que lo sepa o no, ahora no razono con claridad, los problemas con mi padre están afectando mi primera y única relación sana. Sé que Zaira ha notado mis cambios y no es justo que ella, con todas sus cargas, tenga que cargar también con las mías.
- Tu y ella son iguales.- Niega cerrando los ojos.- No seas cobarde, habla con tu pareja y juntas encontrarán la solución a todo lo que las rodea.- Suspiro con pesadez y mientras respiraba recordaba las ultimas palabras de mi padre.
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Huye...De Mi.
Mystery / ThrillerEl ser humano comienza a avanzar cuando pierde el miedo y enfrenta al futuro de frente. No es el caso de Zaira Lombardi. El miedo la paraliza y le teme al fracaso. Alondra Dumont es la antítesis de Zaira. Ella se arriesga y enfrenta sus problemas...