"I see you but I always hesitate 'cause I'm always too late."
Too Late - 5 Seconds Of Summer
[Te veo pero siempre dudo, siempre llego tarde.]
12 de octubre de 2014.
P.O.V. Cristina.
Tras estar casi durante una hora dando una vuelta por un parque cercano al apartamento, decido volver. Abro la puerta solo girando media vuelta la llave y entro. Oigo risas y sonrío.
-Chicos, ¡se os acabó el tiempo para hacer vuestras cochinadas! -grito para que se den por aludidos mientras voy hasta mi habitación y las risas cesan.
-¡Ves, te dije que estábamos solos! -escucho que Louis habla.- Vas a tener que empezar a confiar en mi palabra si quieres que esto funcione porque si no, ¡mal vamos! -argumenta él y ella se ríe.
Me quito las deportivas que llevo puestas y me pongo las zapatillas de estar por casa. Justo cuando abandono mi cuarto, los dos salen del de mi amiga: él detrás de ella, con las manos sobre los hombros de Lena.
-¿Te quedas a comer, Louis? -ofrezco mirándolos detenidamente. Hacen buena pareja.
-¡Ya se te podía haber ocurrido a ti tener ese detalle! -le recrimina el chico a Elena mientras los tres caminamos hasta el salón.- Lo que te decía antes...no vamos por buen camino así...-exagera y luego me mira.- Gracias por la invitación pero tengo que ir a arreglar unos últimos detalles del próximo disco y ya voy algo tarde...-hace una pequeña pausa.-Os veo luego, chicas.-se despide, primero me besa a mí en la mejilla tras susurrarme un "gracias por echarme un cable" y después, le planta un beso en la boca a mi amiga pillándola desprevenida.
Le vemos dejar nuestro apartamento y, en cuanto desaparece por la puerta, me giro para mirar a mi amiga.
-No estaría mal que me contaras qué ha pasado aquí mientras comemos.-sugiero y ella sonríe aun mirando la puerta.
-Pasa que va a ser mi perdición estar con él.-afirma.
-Si todas las perdiciones fueran así, el mundo sería un lugar mejor, ¿no crees? -le pregunto divertida y las dos nos reímos.
Preparamos algo de comer en la cocina mientras me cuenta lo que ella y Louis han estado hablando. Me regaña porque de un momento a otro me vuelvo loca y empiezo a chillar cual fangirl, diciendo que adoro y shippeo Louena y le obligo a que me nombre la fan número uno de la pareja. Tras mi pequeño momento de locura, ponemos la comida en la mesa.
-Es tu turno. ¿Qué tal te fue con Logan ayer? -me pregunta mientras se lleva un trozo de filete de pollo a la boca. No puedo evitar sonreír ampliamente.-¡No me lo digas, no me lo digas! -dice casi gritando. ¡Y luego la loca era yo!- Estáis juntos ¡y ya es oficial! -afirma muy segura.
-Acertaste.-confirmo y me abraza de lado tan efusivamente que casi tira su vaso lleno de agua.- Así que cuando quieras, le dices a Louis que si le apetece tener una cita doble.
Quedamos a las ocho en casa del rubio irlandés así que, con más de una hora de antelación empezamos a arreglarnos. Elena no necesita ducharse porque lo hizo por la mañana pero yo sí. Me meto en el baño y, tras ducharme, me pongo a secarme el pelo: una tarea en la que tardo bastante tiempo. Después voy hasta mi habitación, me pongo un conjunto de ropa interior y miro el armario abierto en un intento por decidir qué escoger. Tras unos segundos, elijo unos vaqueros oscuros algo desgastados y me pongo una camiseta beige de manga francesa con algunas franjas horizontales de encaje. En mis pies, unas botas marrones. Vuelvo al baño para maquillarme un poco y echarme colonia y me encuentro con que Elena se me ha adelantado. Ella lleva puesto unos pantalones grises ajustados con lo que parecen flores difuminadas negras junto a un jersey finito rosa claro y unas botas grises oscuras. Me hace un hueco y en unos minutos, estamos listas. Cogemos nuestros respectivos abrigos y bolsos antes de salir de casa y poner rumbo a la boca de metro.