Capítulo 8: Días inolvidables.

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"These are the days we won't regret, these are the days we won't forget."

The Days - Avicii

[Estos son los días de los que no nos arrepentiremos, estos son los días que no olvidaremos.]


11 de junio de 2014.


P.O.V. Cristina.


Me despido de Elena que se dirige a visitar Hyde Park y yo busco la boca de metro más cercana al palacio de Buckingham y que, a ser posible, me lleve directa a Covent Garden. Subo en Green Park y tras dos paradas, llego a mi destino. Salgo del metro y busco la cafetería que Niall me indicó esta mañana por WhatsApp. Afortunadamente, no me cuesta mucho encontrarla. Mientras me acerco al establecimiento, los nervios empiezan a apoderarse de mí.

¿A qué venía tanta insistencia en vernos? ¿Realmente era posible que estuviera interesado en mí?


Decido no darle más vueltas al asunto. Total, mañana por la mañana dejaríamos la ciudad y, tal y como mi amiga había dicho, no volveríamos a verlos -en persona- nunca más. Entro en la cafetería que está medio vacía y miro a todas partes, buscando alguna señal que me indique dónde está el rubio irlandés pero no hay suerte: una pareja sentada en una mesa al fondo y un hombre con la que supongo que es su hija sentados a mi izquierda es todo lo que veo. ¿Y ahora qué?, pienso. Miro la hora en el móvil y veo que son las tres y media pasadas. Quizás él como no es inglés no posea la conocida puntualidad inglesa. Me acerco a la barra que hay para pedirme un café y un camarero muy amable -y bastante guapo, dicho sea de paso- me dice que me siente en una mesa, que él se encarga de servirme el pedido. Me siento en una mesa cerca de la puerta para estar pendiente de la llegada del irlandés y dejo el móvil en la mesa. El camarero me trae el café que he pedido y empiezo a jugar con mi teléfono para distraerme mientras me lo bebo.


Me he pasado ya cinco niveles del Candy Crush y por allí no hay rastro de ningún miembro de One Direction y menos del rubio. Genial, me ha dejado plantada. Eso me pasa por ser una tonta que cree que uno de sus ídolos quiere quedar con ella a tomarse algo. Vuelvo a desbloquear el teléfono y descubro que ya son las cuatro y cuarto de la tarde, creo que haberle esperado durante cuarenta y cinco minutos es más que suficiente así que me levanto y voy hacia la barra para pagar mi consumición.


P.O.V. Elena.


-Ahora en serio, ¿me estás persiguiendo o algo? -le pregunto y él se echa a reír.

-¿Es que crees que soy un psicópata? -le miro alzando una ceja, sin decir nada. Y, ante mi silencio, habla de nuevo.- ¡¿Qué clase de fan eres tú si piensas eso de mí?! -ahora la que ríe soy yo.

-Demasiadas casualidades, ¿no crees?

-La vida está llena de ellas.-responde y niego con la cabeza divertida.- ¿Dónde has dejado a Cris? -quiere saber mientras empezamos a caminar por el parque y yo sigo haciendo fotos.

-Ha quedado con Niall.-contesto.

-El irlandés no pierde el tiempo.-comenta sonriendo.

-Es que se le acaba.-informo.- Mañana volvemos a casa.

-¿Estás diciendo que no podré perseguirte más? -dice algo dramático y no puedo evitar no soltar una carcajada.

-De todas formas, tú tienes una gira que hacer así que no ibas a poder seguir con tu faceta de acosador durante mucho tiempo.-bromeo.

Without Limits #BEAwards2016 #GBAwards2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora