To Mend The Broken Heart (Severus Snape)

Capítulo Cuarenta: Todo termina esta noche (CAPÍTULO FINAL)

Se había acabado. Cuando Harry se encontró con nosotros con la noticia de la derrota de Voldemort, salté a sus brazos y besé su rostro. Me emocioné. Me reí.

-¡Se acabó, se acabó! - y reí mientras Harry se sonrojaba profundamente. Incluso canté junto al coro con Kingsley;

-¡Ahora Voldy se ha ido, hemos ganado! - Caminé ahora, entre Harry y Hermione, en el Gran Comedor.

Todo el mundo estaba reunido aquí, aunque era un triste espectáculo para ver, arruinando al instante mi estado de ánimo eufórico. Cuerpos de inocentes dispersos, y gente sosteniéndose entre sí... sosteniendo sus pérdidas. Cho y la profesora Trelawney cerraron los ojos de una joven y la cubrieron con una manta. Mientras caminaba por el pasillo, vi tanta tristeza.

Pero lo peor de todo, vi a los Weasley en la parte delantera del frente. Y estaban todos abrazados, llorando. Me detuve, y mis ojos se abrieron. No podía ser. Conté a los que vi. El señor y la señora Weasley, Ginny... Ron estaba conmigo... Alguien estaba en el suelo sobre una manta, y alguien más se inclinado sobre él. Los gemelos. Ahogué un sollozo y jadeé, a pocos pies de distancia de ellos.

Mi grito fue escuchado por la gente, y vi a George mirarme con el rostro lleno de lágrimas y los ojos rojos e hinchados. Su cabello rojo era un desastre, y estaba sangrando en algunos lugares. Él se levantó de su posición agachada sobre su hermano muerto, y corrió hacia mí. Abrí los brazos, con el rostro retorciéndose de dolor, y ayudé a cerrar la distancia.

George se derrumbó en mis brazos, enterrando su cabeza en el hueco de mi cuello, su cuerpo convulsionaba por causa de los sollozos de dolor. Lloré con él, abrazándolo con fuerza.

-Lo-lo siento... - Lloré. George agarró mi ropa en sus puños, sosteniéndose en mí.

-No pude salvarlo... - sollozó George, su voz tan pequeña y llena de tortura. Pensar en alguien matando a Fred... Bondadoso, enérgico, cariñoso, divertido y dulce, era horrible. Mis amigos. Y pensar que lo último que le dije fue "Por favor, mantente a salvo", y me prometieron una fiesta de celebración después.

Nunca habría una fiesta. Demasiadas muertes pensar siquiera en celebrar. Sostuve a George cerca, el duelo por la pérdida de todo con él.

-D-desearía haber e-estado c-con ambos - tartamudeé, tratando de dejar de llorar.George se veía tan desconsolado, como un niño pequeño. Tan roto. Perdió lo que más valoraba en el mundo, el que nunca lo había abandonado. Su hermano gemelo - Perdí a mi hermana gemela después de sólo unos días juntas - Le susurré, no confiando en mi voz.

George asintió, calmándose. Odiaba verlo así. Mi buen amigo. Él y su hermano fueron los primeros en ponerse de pie por mí cuando estaba siendo intimidada. Los dos eran verdaderamente valientes, amables, gente increíble. La más divertida.

Así que muchos habían perdido la vida esta noche. Miré hacia el cadáver de Fred, yacía pacíficamente y pálido sobre una manta oscura. Mi boca se volvió un ceño más profundo y mis labios temblaron. George pasó corriendo junto a mí, a los brazos de su otro hermano, Ron. Ron gritó y abrazó a su hermano, y Hermione se cubrió la boca, con lágrimas en sus ojos.Corrí hacia donde estaba Fred, y me arrodillé junto a él. Puse una mano en su mejilla fría, las lágrimas salpicaban en la mejilla de mi amigo. Puse mi cabeza en su pecho con calma, el silencio y la fría quietud me repugnaba.

-Siempre estuviste ahí para mí cuando alguien intentaba derrumbarme. Siento mucho no poder estar allí para ti cuando más necesitaste mi ayuda - Dije en voz baja, las lágrimas comenzaban a parar. Me aparté. Entonces vi a Remus y a Tonks.

No los conocía bien, realmente sólo a Remus Lupin, desde tercer año en DCAO. Pero la forma en que yacían allí, idos del mundo... Con las manos tan cerca, los dedos tan cerca, casi tocándose. Yo sabía que tenían un hijo. Un hijo: Teddy. Un pequeño bebé que nunca recordaría a su mamá y a su papá, crecería sin padres.