🖕 ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝔙𝔢𝔦𝔫𝔱𝔦𝔠𝔲𝔞𝔱𝔯𝔬 🖕

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" Park YajaTzaelly, diecinueve añitos de vida"

JimDae sonrió de ternura al ver cómo su bebé TaeHyung de dos añitos soltaba balbuceos con las cajas de cereales en polvo que habían en el carrito, ya que estaba sentado ahí adentro y todo lo que él metía parecía llamarle la atención.

— ¿No extrañas a JiMinie, bebito? Yo sí.

Al escucharlo hablar, el bebé levantó la mirada y dejó los ojitos en él, después le sonrió y queriendo estar cerca de él, se puso de pie mientras se agarraba de los estantes para no caer, así lo llamó con la manita.

— Papá... papá.

— Bebé, bebé.

Viéndose tan adorable con su overol y su boina, JimDae lo cargó y sonriendo le besó toda la carita, luego siguió buscando las otras cosas que salían en la lista que DaeGin le había hecho, pues quería hacer un postre para toda la familia.

— Aww, eres un bebé tan hermoso y yo te amo tanto — Susurró — Nunca te cases, por favor.

Sí.

Luego de darse cuenta de que había sonado como YajaTzael, se reprendió mentalmente y mientras TaeHyung movía los pies con los bracitos alrededor de su cuello, buscó irse a la otra sección para seguir con lo suyo.

— Estúpido niño, ¿de dónde saliste tan pendejo? Te dije que te ibas a caer.

Cuando llegó a la otra sección y miró que un hombre regañaba a un niño como de cuatro años, él parpadeó un par de veces, algo traumado por su aparente malhumor.

— Pero e-es que yo quería ir con mi tío.

— Tu tío está en la universidad, ahí no aceptan niños, YoonGi.

Tratando de ignorar la conversación, JimDae buscó las bolsas de harina, fue ahí en donde su mano chocó con otra, por lo que decidió mirar hacia la derecha y notar al tipo que había estado regañando al niño.

Esa cara como que se le hacía conocida.

— ¿Y tú qué me ves? ¿Se te perdió algo o qué? ¿Soy o me parezco?

Él no dijo absolutamente nada, solo fijó sus ojos en ese chico y en él cómo tomaba un par de bolsas de harina en medio de tantos gruñidos, reafirmando el malhumor que se cargaba.

Más allá de eso, ese rostro aniñado se le hacía familiar y cuando cayó en la cuenta de quién era, su corazón empezó a bombear como loco, exigiéndole que se acercara al chico del que alguna vez estuvo enamorado.

— ¿GiYoon...? ¿GiYoonie?

El menor dejó caer la harina al carrito solo para darse la vuelta y verlo ante lo que había dicho. Sus ojos se llegaron a conectar con intensidad y los recuerdos se desataron en ellos, demostrando así que ninguno de los había olvidado al otro.

— JimDae... Hyung...

GiYoon sonrió y quiso acercarse para abrazarlo, para decirle lo mucho que lo había extrañado, para confesarle que ni un día lo olvidó, pero sus frenos fueron ver a un niño entre sus brazos, eso lo hizo retroceder mientras caía en la cuenta de que ya eran adultos y de que tenían familia.

— ¿Es tu hijo?

— Sí, es... uno de mis hijos — Murmuró el mayor — Y, pues... me casé.

Wow.

GiYoon intentó sonreír, mas solo se vio una mueca. Algo nostálgico y triste se alejó, retrocedió hasta chocar con su hijo, ese que seguía llorando porque su tío no lo llevó a la universidad.

— ¿Y ese gatito quién es? ¡Woah! ¿Es hijo de Zaelly?

— No... es mi hijo mayor.

Algo incómodo debido a la tensión que salía, cargó a YoonGi y le limpió las lágrimas, le acarició el pecho para que ya dejara de llorar y buscara calmarse.

JimDae, por otro lado, no evitó mostrar esa cara de decepción, pues ahora que lo veía otra vez sentía que su corazón le pertenecía, pero estaban casado, con familias, con hijos.

— Te casaste, entonces.

— Sí, estoy casado... como tú, ¿no? — Murmuró GiYoon — Digo, ya somos adultos y eso...

— Exacto, sí...

Hubo un momento en el que todo quedó en silencio, en el que todo se vio tan incómodo, con tanta tensión de por medio que lo único bonito era TaeHyung sonriéndole a un amargado YoonGi.

— Bueno, yo ya me tengo que ir, pero fue un gusto verte JimDae. Me saludas a tu esposa.

— Sí, tú también salúdame a tu esposa.

— Bien.

— Bien.

Sin nada más que hacer ahí y nada más que decir, JimDae se fue de esa sección sin ganas de ver hacia atrás y notar que GiYoon tenía unas intensas ganas de llorar.

Maldecía una y otra vez haberse ido a China. Si se hubiera quedado, habría intentado conquistar a JimDae y ser él quien estuviera a su lado como lo había soñado desde que era un niño.

Lástima que las cosas habían cambiado tanto.










𝔐𝔯. 𝔇𝔢𝔪𝔬𝔫𝔦𝔬 (Pɑrk YɑjɑTzɑel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora