dos

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"Sensei".

El descanso transcurrió normal, como ya era costumbre. Tsuki decidió ayunar, no quizo molestar a su hermano pues desapareció en cuando Iruka los dejo salir.

En cuanto a los gemelos Uzumaki, no es que no le cayera bien Jin, solamente era muy tímida para entablar una conversación con ella. En cuanto a Naruto, tenía más libertad de expresarse, de cualquier modo no se acerco a ellos.

Pasó el resto del receso debajo de un árbol comprendiendo algo de teoría del ninjutsu medico, de cierta manera le llamaba bastante la atención.

Nuevamente estaban en el salón, esperando por la llegada de su sensei, las horas habían pasado ya eran aproximadamente más de las cuatro de la tarde y solo quedaban ellos en el lugar.

—Naruto, siéntate. —Pidió la rubia sentada al lado de Tsuki quien estaba demaciado concentrada en su lectura como para poder prestar atención a su alrededor.

Sasuke... Bueno Sasuke es Sasuke, el miraba con fastidio a los gemelos, de vez en cuando le daba un vistazo al libro de su hermana asegurandose de que no leyera nada que no fuera acorde a su edad.

—¡Naruto, eso no va a terminar bien! —Reprendió la mayor de los dos luego de que él colocase un borrador entre la puerta y si marco, con el objetivo de que cayera sobre su futuro maestro.

—Un jounin no va a caer en una vieja y estupida broma como esa... —Comentó el niño de ropas azules.

—Por más que odie admitirlo, el "dobe" tiene razón, Naruto. —Justo en ese momento y cuando Sasuke iba a reprochar, la puerta se abrió dejando ver a un hombre.

Cabellos platinados, lo único visible de su rostro era su ojo derecho pues su rostro estaba cubierto por una máscara y su bandana ninja. El borrador cayó sobre su cabeza dejando decepciónado al Uchiha y la Uzumaki.

Tsuki levantó la mirada de su libro antes de analizar detenidamente al sujeto. Kakashi del Sharingan. Nunca lo había visto en persona, pero era toda una leyenda para los shinobis sobre todo en los libros de historia. Aun así no pareció comprender de donde salía ese apodo.

—Uhmm... ¿Cómo se los planteo? —Se preguntó a si mismo luego de recoger el objeto que había golpeado su cabeza segundos atrás. Su mano viajó hasta su mentón para así continúar. —Mi primera impresión de este grupo... son una bola de idiotas.

Los cuatro adquieron una aura de decepción pero nadie se atrevió a decir nada.

—Los veo en la azotea, ya. —Sin nada más que decir y en un parpadeo el ya había desaparecido.

—Me cae mal, demaciado engreído. —Soltó la rubia. —Se parece a alguien de aquí.

Sasuke chasqueo la lengua luego de que los menores lo dejaran solo con ella, Naruto y Tsuki habían salido corriendo luego de que el platinado desapareciera.

—Eres demaciado insoportable.

—¿Yo? —Preguntó de forma altanera. —No eres para tanto, Uchiha. —Y sin decir nada más se alejó un par de pasos.

—¡Más rápido, Naruto! —Exclamó ella.

El niño daba todo de sí, intentado subir las escaleras a largos pasos.

—¡Ya casi llegamos, Tsuki-chan!

Una vez arriba, el hombre de chaleco verde ya estaba apoyado contra la cornisa, les ordenó sentarse para que segundos más tarde llegasen los mayores entre esos cuatro.

—Veamos, porque no hacen una presentación de ustedes mismos —Sugirió.

—¿Qué debemos decir? —Se atrevió a preguntar la menor de los Uchiha.

𝐌𝐈𝐃𝐍𝐈𝐆𝐇𝐓 𝐑𝐀𝐈𝐍 - Uzumaki Naruto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora