El Destino de Estar Juntos [LIBRO 1 y 2] [Completa ✔️]

Capítulo 23: Can't take my eyes off you

Timeless – Taylor Swift

17 de septiembre, 2023

Lo primero que mis ojos detectan al despertar es a un Allen al lado del gran ventanal, donde se puede observar el océano, pacífico solo admirando la vista. Hace tres días Allen me sorprendió con un viaje de sorpresa a los Hamptons, dijo que nos merecíamos estás vacaciones después de estos meses, así que sin más nos encaminamos hacia la playa.

—¿Cuánto dormí? — inquiero.

Él se voltea. Ayer nos dormimos bastante tarde, técnicamente hoy mismo, a eso de las siete de la mañana.

—Buenas noches — sonríe —, son las cinco de la tarde.

Abro mis ojos más de lo normal.

—¿¡Las cinco!? Wow — ríe —. En mi defensa, estas camas son demasiado cómodas. Venga, ven conmigo.

Enredo mis brazos alrededor de su cuello y lo arrastro hacia la cama conmigo. Nos estamos quedando en un hotel, aunque Allen confesó que se le pasó por la cabeza la idea de comprar una choza de vacaciones como la que tiene la familia Blake, estoy agradecida de que no lo haya hecho. Es decir, solo serán unas vacaciones de una semana, dudo que necesitemos una choza para más adelante.

Enredo mis piernas entre las suyas y lo abrazo fuerte, logrando sentir que estoy en mi hogar. Porque él es mi hogar.

—He reservado una cena para esta noche en un lugar especial — habla.

Frunzo mi ceño.

—¿Lugar especial? ¿Qué significa eso?

Él sonríe.

—Significa que es una sorpresa.

Entrecierro mis ojos.

—¿A qué hora es la reservación?

—Siete.

—¿¡Siete!? Pero, se me está acabando el tiempo.

Me pongo en pie de un salto. Allen ríe sobre la cama, con su espalda recostada en el respaldar y sus manos detrás de su cabeza.

—¿Tarde para qué?

—Para ponerme guapa — digo con obviedad.

—Ya estás guapa.

Reviso mi aliento exhalando sobre la palma de mi mano. Apesta. Hago un mohín.

—No, te aseguro que no lo estoy.

Una risa trepa por su garganta.

—Vale, como tu digas.

Empiezo a movilizarme. Lo primero que hago es encaminarme hacia el baño para darme una ducha y cepillarme los dientes; una vez que mi cuerpo y dientes están limpios analizo mi reflejo frente al espejo en el cuarto de baño. Me he lavado el cabello, así que está húmedo, pero no estoy segura si secármelo, dejarlo así o hacerme un recogido. Dejo eso de lado al observar que son las seis en punto. Recojo mi maleta del suelo y la abro para buscar que conjunto vestirá a mi cuerpo hoy, hasta que caigo en cuenta en que no tengo idea de hacía donde nos dirigimos.