Capitulo 40 El Encuentro Con El Pequeño Endymion

66 7 1
                                    

Al Día Siguiente

Serena había llegado tarde a la empresa, no había podido dormir en toda la noche pensando en lo qué decía la carta de Luna, por más qué lo analizaba no lograba entender cómo había podido estar tan ciega, y haberse quedado engañar por tantos años por Artemis, caminaba a toda prisa por el pasillo qué dirigía a su oficina, había fijado a primera hora una reunión con un detective privado qué le había recomendado su abogado Zafiro para poder dar con Artemis.

Estaba dispuesta a todo para verlo en prisión justo en ese momento salió Darien de una de las oficinas pero sín percatarse qué Serena pasaba por allí, al mismo tiempo qué Darien caminaba del lado contrario con un café caliente en las manos, no se dió cuenta y se tropezó con Serena derramando el café hirviendo encima de su blusa, lo qué enseguida hizo qué Serena gritara por el ardor qué le había ocasionado.

-¡Ay! Pero ¿Por qué no se fija por dónde camina? - gritó Serena y con la prisa qué lleva no se había dado cuenta de qué se trataba de Darien, de pronto escuchó su voz.

-Discúlpame Serena, no fué mí intención - Darien se disculpó.

Serena levantó la cabeza y al cruzar su mirada con la de Darien, su corazón comenzó a latir con fuerza sintiéndose qué en ese momento qué estaba a punto de salir del pecho, sólo alcanzó a decir.

-¡Tú! No sabias qué eras tú - susurró Serena.

Darien enseguida sacó su pañuelo para tratar de limpiarle la blusa, pero Serena enseguida le quitó la mano de encima, estaba demasiada nerviosa y lo último quería era encontrarse con Darien, y mucho menos qué Darien le pudiera un dedo en cima, pero los problemas no terminaron cuándo de pronto se escuchó una voz de mujer.

-¿Interrumpo? - preguntó Saori.

Cuándo Serena y Darien voltearon se dieron cuenta qué se trataba de Saori, la cuál había ido a la empresa para ver con sus propios ojos a Serena, y corroborar todo lo qué Darien le había contado la noche anterior.

-Pero ¿Qué haces aquí Saori? - Darien preguntó molesto, ya qué sabía cuáles eran sus intenciones.

-¿Acaso hay algún problema en qué venga a visitar a mí marido en su sitio de trabajo? ¡Ups! Disculpa Serena, no te reconocía con esa ropa fina y sín silla de ruedas - dijo Saori con burla y Darien enseguida intervino.

-¡Basta Saori! No es necesario qué tengas qué ofenderla - dijo Darien molesto.

-Tranquilo Darien, a mí no me ofende, se nota qué sólo suelta la porquería qué lleva por dentro, este tipo de personas para mí son digna de lastima - dijo Serena y enseguida Saori se acercó para darle una bofetada pero Darien la detuvo rápidamente.

-Ni se te ocurra ponerle un dedo encima a Serena por qué si no... Saori enseguida interrumpió a Darien sín dejarlo terminar de hablar.

-¿Sí no qué? ¿Me vas a pegar? - Saori dijo con sarcásmo, ambos se vieron fijamente con una mirada llena de coraje.

-A partir de este momento tienes la entrada de la empresa Saori, no quiero qué vengas a hacer escándalo cada vez qué se te pegue la gana - ordenó Serena.

Darien la tenía agarrada por ambas muñecas tratando de qué Saori no se acercara a Serena, su única intención era brincarle encima y hacerle daño, pero al ver qué no podía soltarse de las manos de Darien sólo gritó con histeria.

-Tú a mí no me prohíbes nada, eres sólo una recién vestida, nueva rica, qué lo único fino y elegante qué tienes es la ropa qué llevas puesto - Saori gritó con rabia.

Serena ya colmada de tiros los insultos por parte de Saori, no le quedó otra opción qué mandarla a sacar a la fuerza ante la mirada de todos los empleados, y ejecutivos qué se encontraban alrededor.

CASADA CON MÍ ENEMIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora