CASADA CON MÍ ENEMIGO

Capitulo 46 Terapia Intensuva

Mientras Tanto:

Gracias al buen desempeño qué Rei había tenido en la clínica, cuándo trabajaba allí había conservado muy buenas amistades, especialmente con la jefa de enfermera qué estaba encargada del área de cuidados intensivos en dónde se encontraba Darien.

-Rei, sabés qué me metería en problemas sí alguien se entera qué te dejé entrar, el doctor ha prohibido las visitas al paciente, está muy delicado -dijo la enfermera.

-Lo sé, y no sabés cuanto te agradezco qué me permitas verlo, lo qué pasa es qué es hijo de quién fué mí jefe qué en paz descanse y le tengo mucho cariño, es por eso qué me gustaría verlo aún qué sea sólo un momento, te prometo qué será muy rápido y te aseguro qué nadie se va a dar cuenta - dijo Rei.

-Está bien, ya sabés el protocolo, en el cubículo tiene un Kit con una bata y tapabocas, por favor trata de qué sea rápido para qué nadie se dé cuenta, mientras tanto yo estaré aquí vigilando por sí alguien del personal médica aparece - dijo la enfermera.

La jefe de enfermeras no estaba al tanto de las intenciones de Rei, ella confío en sus palabras, además no había razón para no creer en ella, ya qué lo qué había dicho era cierto, sín embargo ella ya iba preparada a cumplir su misión, Rei entró al pequeño cubículo y se colocó la bata quirúrgica y el tapabocas pero en el bolsillo de su ropa, llevaba una pequeña jeringa qué le iba a servir para tomarle una muestra de sangre, qué era más qué suficientes para poder hacer la prueba de ADN, cuándo Rei logró ingresar a la sala de cuidados intensivos, se llevó una gran impresión al ver a Darien tan golpeado, tenias hematomas en casi todo el cuerpo, su rostro estaba hinchado y con moretones, realmente había sido un accidente muy aparatoso, estaba totalmente inconsciente y había perdido mucha sangre.

Pero gracias a su buen amigo Kunzite qué había llegado justo a tiempo pudo recibir la transfusión, Rei estaba acostumbrada a ver este tipo de situaciones gracias a sus años cómo enfermera, sín embargo le causó mucho pesar ver a Darien en ese estado, recordó todo el tiempo qué había servido a su padre y lo mucho qué lo estimaba, esa era una razón muy fuerte para ayudar a Serena y a Darien a descubrir la verdad de su origen, "Muy bien señor Chiba, voy a darle un pequeño pinchazo qué estoy segura no va a sentir, pero créame qué lo estoy haciendo por su bien y el de la señora Serena", Rei se acercó con mucho cuidado muy pendiente de qué nadie la viera, sacó la jeringa rápidamente de su bolsillo y dió un leve pinchazo en su brazo.

Extrajo sólo un poco de su sangre y guardó enseguida la jeringa, lo miró y le dijo mientras lo tomaba de su mano, "Tiene qué luchar para salvarse, allá afuera lo están esperando su hijo y quiero decirle un secreto, estoy casi segura de qué usted no es hermano de la señora Serena", cuándo Rei terminó de decir eso enseguida sintió qué Darien le apretó su mano, esa fué una señal muy clara de qué Darien había escuchado todo lo qué Rei le había dicho, ella estaba emocionada qué por un momento se había olvidado del tiempo qué tenía allí, enseguida la jefa de enfermera entró a avisarle qué ya tenía qué salir.

-Lo siento, la verdad es qué no me di cuenta qué ya habían pasado los cinco minutos pero es qué me apretó la mano, eso es un buen síntoma - dijo Rei.

-Así es Rei, todos esperamos qué se recupere y salga de cuidados intensivos, pero por favor vete ya por qué sí no a la qué van a echar de la clínica es a mí - suplicó.

-Tiene razón, muchas gracias por hacerme permitido verlo, no sabés el favor tan grande qué has hecho, te lo sabré recompensar - dijo Rei y salió a toda prisa de allí pero justo se encontró con Serena y Zafiro qué justamente la estaban buscando.

-¿Qué pasó Rei? ¿Pudiste conseguir una muestra de Darien? - le preguntó Serena angustiada.

-Sí, tomé una muestra de sangre, eso es mucho más qué efectivo ¿Y usted pudo conseguir la muestra de la señora Neherenia? - preguntó está vez Rei.

-Sí, aún qué no sé sí esto sirva, es el vaso dónde Neherenia estaba bebiendo un té - respondió Serena.

-Sí, está perfecto, de allí extraen la muestra de su saliva, sólo falta su muestre señora Serena - dijo Rei.

-¡Sí claro! ¿Servirá con unos cuantos cabellos? - preguntó Serena.

-Pero por supuesto qué sí, es más qué suficiente, ya tenemos todo -mencionó Rei, Zafiro enseguida intervino.

-Pues no hay tiempo qué perder, llevemos las muestras al laboratorio - sugirió Zafiro.

Se fueron a toda prisa al laboratorio qué quedaba fuera de la clínica pero Serena no pudo evitar preguntarle a Rei por Darien.

-Rei ¿Cómo está Darien? ¿Está muy grave? - preguntó Serena.

-Sí señora Serena, no lo voy a engañar, el señor Darien no se ve muy bien, el accidente fué muy aparatoso, lograron hacerle la transfusión de sangre y eso lo va ayudar a recuperar, sín embargo debemos esperar - explicó Rei.

Serena bajó la mirada y una lágrima corrió por su rostro, estaba realmente muy angustiada y tenía miedo de qué Darien muriera cómo le pasó a sus padres en el accidente, era muy evidente qué Serena tenía un trauma de aquél día fatal en el qué no sólo había perdido a sus padres, sí no qué además había quedado paralítica, Rei al verla así tan afligida le dió ánimo.

-No se ponga así señora Serena, quiero decirle qué cuándo tomé la mano del señor Darien, y le hablé de Usted y su hijo el señor Darien apretó mí mano levemente, lo qué significa qué está consiente y eso es muy buena señal - comentó Rei y a Serena se le iluminó el rostro nuevamente pero sín embargo se veía un poco apagada.

-Señora Serena pero tenga fe, además vamos a llevar las muestras y muy pronto sabrá toda la verdad y se le quitaran todas esas dudas - dijo Rei.

-Dios quiera Rei - comentó Serena.

.....

Mientras tanto en la mansión, el pequeño Endymion se encontraba durmiendo en su habitación, ya había llegado la noche y Seiya sólo quería darse un baño, descansar un poco y luego regresar a la clínica para estar al lado de Serena, tenía miedo de qué en cualquier momento pudiera suceder algo qué le hiciera enterarse de la verdad, se metió al baño a darse una ducha tratando de relajarse, cerró los ojos y dejó qué el agua tibia cayera en su cuerpo, de pronto sintió unas manos tocando su pecho lo qué enseguida Seiya abriera los ojos sorprendido.

-¡Neherenia! Pero ¿Qué haces aquí? ¿Acaso te has vuelto loca? - preguntó Seiya...