✘DAREL: Mundo Vampirico✘ © [SVD#4]

Capítulo 38 ✘ Por una estaca

En cuanto el antiguo vampiro se encuentra fuera del ataúd, es recibido con un abrazo por su creación.

Derek permaneciendo inmóvil, Elizabeth derramando más lágrimas de sangre hasta alejarse.

-Padre, ya anhelaba que despertara.

Él sus largas uñas las guía a su rostro, borrando todo rastro de su sangre de sus pálidas mejillas.

-Elizabeth -aleja lentamente su mano, sus uñas manchadas de sangre-No actives la maldición, hija mía.

Ella baja la vista

-Lo siento padre, no controlo mis emociones -alza la vista- cada gota de sangre, es de felicidad.

El antiguo vampiro desvía la vista en Darkiel que al instante hace una reverencia.

-Mi Señor -al enderezarse, sitúa sus manos detrás de su espalda- Una disculpa, tuvimos que interferir en su descanso.

-Padre -su hija capta nuevamente su atención-. Es urgente su intervención. El humano que convertiste, hace meses que una creación suya lo despertó y desató la Guerra contra el vampirismo, debilitandonos a todos y no es lo peor, liberó a la Sombra que se mantenía en el hijo del Rey.

Elizabeth comienza a relatarle absolutamente todo.

-... Y puedo sentirlo, es más fuerte. A estas alturas, ya debieron atacar el Castillo.

-Mi descontrolada creación -emite el vampiro y agarra las manos de su hija- Iré, Elizabeth. Vlad no será más un problema.

De pronto, la puerta es abierta entrando cada vampiro de la Corte con otra vampiresa.

-¡Derek! -emite Black tras hacer una reverencia como todos- Si ya estás despierto, actúa en contra de tú creación.

-Detenla o nos va a perjudicar a todos -le dice Gabriel con molestia. Recientemente despierto como Luckian.

-Solucióna tú error, Derek -le dice otro vampiro situandose a un lado de su hermano.

-No hay mucho tiempo -espeta Lezy al sostener a Jonathan que con esfuerzo se mantiene en pie.

-Con todo respeto Derek, que estés despierto nos otorga poder a cada uno, una poca recuperación y al mismo tiempo el Cazador la absorbe.

-Su debilidad no será permanente Gabriel, Luckian, Blackniells -comienza a sonreír con malicia mostrando sus largos y puntiagudos colmillos. - y Jonathan - regresa a ver a su hija- Aunque sea un castigo merecedor.

-Yo te acompaño, padre. Déjame ayudarte.

-No hija mía, te quedarás aquí como todos.

-Mi Señor -Darkiel da un paso adelante-Se encuentra débil por su reciente descanso, así no puede enfrentar al Señor Vlad y mucho menos al Rey de sombras. No puede, se va a perjudicar a si mismo.

-No es la primera vez, Vlad merece un agonizante castigo. La oscuridad no será eterna.

-Tú no destruyes a tús propias creaciónes, padre.

-Vlad fue mi mayor error, hija mía. No tendré compasión por una creación mía, traidora con su propio creador que intenta evitar mi eternidad. No podrá -levanta sus manos dándole un casto beso en el dorso- Tú eres diferente Elizabeth, te ofrezco una disculpa.

-No padre, no tengo nada de que perdonarle.

Derek sin soltarla desvía la vista en el ataúd.

-No puedo resucitar a Mellissa. No hay nada que pueda hacer por ella.-regresa a verla.