✨️Nanon.✨️
Entro nervioso a dejar el desayuno en la cocina, y los veo a los dos detrás de mí, cuando giro.
Es un poco incómodo.
—Tengo que trabajar —les digo caminando al cesto de ropa.
Lo levanto, para irme ya a la lavandería.
—¿Te ayudo? —me pregunta Ohm y yo muevo la cabeza negativamente.
—Estoy bien —respondo porque no necesito que lo haga.
—¿Te veo en el almuerzo? —insiste y Dew está mirándolo.
El conocernos lo ha tomado por sorpresa.
No hay una historia larga que contar, fui breve al explicarlo.
Iba a mi escuela, es todo.
No veo necesario detallar lo demás.
Ohm va a casarse, no creo que sea cómodo para él hablar de una relación adolescente que terminó antes de empezar.
—Sí —le respondo saliendo al pasillo.
Los pasos de Dew detrás de mí, me hacen detenerme después de presionar el botón del ascensor.
—¿Qué pasó? —le pregunto y él pasa la mano por su cuello.
Si ha venido es porque quiere hablar.
—E-Estuve pensando en las cosas de las que hablamos.
—Hablamos de mucho —resalto ladeando la cabeza— vas a tener que ser más específico.
Él cierra las puertas, para ir conmigo al piso inferior.
—Hice algunas llamadas en la mañana.
—¿A quién? —le pregunto y él suelta el aire que estaba reteniendo.
—No estoy acostumbrado a pensar antes de actuar.
—Lo sé —susurro bajando en la lavandería y dejo el cesto en el suelo.
—Y quiero ser una persona mejor.
Muevo mi mirada a mi mano derecha, porque él la toma.
—Yo creo que eres un buen chico —le digo sinceramente, porque eso es lo que pienso.
—No es suficiente, quiero merecerte.
Estoy algo confundido.
—Tú estabas preocupado por las necesidades de la mujer a la que despedí.
—Sí, lo estoy.
—Le pedí considerar volver a su puesto, después de explicarle el porqué creo que su comportamiento fue inadecuado, y si ella realmente necesita el trabajo, se disculpa por sus errores y aprende a respetar a todo el personal, puede regresar.
Presiono mis labios, mirándolo, con el corazón acelerado.
—¿Se lo pediste? —le pregunto y él asiente.
—Le ofrecí mis disculpas también, porque no fui la persona más educada del mundo al correrla.
—¿Por qué? —susurro mirando sus labios y él agarra mi rostro.
Sé que Dew nunca se disculpa.
—Ya sabías que puedo deshacerme de todo lo que esté molestándote —dice acariciándome con su pulgar— y ahora sabes que también puedo agachar la cabeza ante cualquiera, si es por ti.
Cierro los ojos, porque acerca su rostro al mío y suspiro, cuando siento sus labios en mi frente.
—Estoy enamorado de ti —susurra alejándose y me apoyo en la pared, porque regresa al ascensor.
Mis mejillas están ardiendo y sonrío al ver el reloj que trae en la muñeca. Yo tengo el que me ha dado en la mía, cubierta por mi uniforme.
