Suga, Akaashi, Kenma, Oikawa, Atsumu y Suna se mezclan con los problemáticos de la escuela, gracias a esto, el drama se vuelve parte de la cotidianidad, las relaciones afloran y los oscuros secretos salen a la luz, para bien o para mal.
Esta histori...
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Ese día, después de la escuela, Akaashi y Oikawa se fueron juntos para dirigirse a casa. Viven a dos casas se diferencia, así que la mayoría de las veces, se van y regresan juntos.
Charlan sobre Suga y Sawamura, ya que el peligris no le contó a nadie lo que sucedió cuando fueron a hablar solos.
—En serio, creo que se besaron.
—Kawa, no hay forma de que se haya besado con Sawamura. Lo hubiéramos sabido —Toru hace un puchero antes de continuar.
—¡No es cierto! Me he besado con mucha gente y ustedes no tienen idea —Akaashi le da una mirada incrédula.
—Lo sabíamos. Simplemente no dijimos nada al respecto. De todos nosotros, eres el menos sutil —Oikawa gime desagradablemente, a lo que Akaashi también pone los ojos en blanco.
Mientras caminan por la acera, Keiji se da cuenta de que alguien está parado un poco más adelante, apoyado contra la pared de una casa cercana a ellos. Parece muy familiar, pero Akaashi no puede ubicarlo. A medida que se acercan, queda claro que es un adolescente y que parece tener más o menos su edad. Bueno, Akaashi no está realmente seguro de eso, teniendo en cuenta que está fumando, pero de cualquier manera le llama la atención que sea la primera vez que lo ve en su calle. Akaashi continúa tratando de ubicar a este hombre, ya que realmente le resulta conocido y es entonces cuando Oikawa se detiene con los ojos muy abiertos.
—¡Qué mierda haces aquí! —grita llamando la atención del chico, quien sonríe en el momento en que lo ve.
—Vivo aquí, idiota —se muestra inexpresivo, señalando la puerta tras su cuerpo. Akaashi también está un poco sorprendido. Ha escuchado un poco de él por Suga, así que esto definitivamente va a ser entretenido— ¿Qué estás haciendo aquí? —pregunta antes de llevarse el cigarrillo a los labios mientras Oikawa parece querer matar a alguien más. La imagen hace que Akaashi se ría en voz baja.
—Ambos vivimos a una cuadra de distancia —Akaashi elige responder, recibiendo una mirada de Oikawa al instante mientras se acercan lentamente al chico. Caminan a través del humo que hace que Akaashi tosa y haga una mueca, mientras que por otro lado, Oikawa ni siquiera se inmuta, no le molesta, lo cual es un poco sorprendente.
—No me di cuenta de que vivíamos tan cerca de Shittykawa —Akaashi resopla ante el apodo, parándose a un lado para mirar a Oikawa, quien se queda directamente frente al otro, luciendo extremadamente molesto.
—Mala suerte que, de todos los idiotas que existen, tú vivas cerca —Oikawa pone los ojos en blanco con un suspiro, Iwaizumi simplemente le sonríe.
—No finjas que no estás un poco feliz de tener un vecino atractivo —responde Hajime y Oikawa se burla.
—Oh sí, no hay nada más sexy que un chico de diecisiete años que fuma —Iwaizumi vuelve a sonreír, inhalando más humo antes de lanzarlo hacia Oikawa, quien está lo suficientemente lejos como para que no le alcance.
