Apocalyptic Nightmare | Kookv

Final

—Vamos a seguir por toda esta calle y daremos vuelta a la derecha en tres cuadras. La ciudad está demasiado cerca de aquí, y probablemente está llena de caminantes. Es mejor que nos mantengamos lejos. —dijo Taehyung cuando iban caminando por la calle -. Estoy seguro de que Jungkook no se arriesgaría a entrar a la ciudad. Sigamos buscando en los vecindarios.

Las calles son amplias y repletas de basura, hojas de árboles secas y cadáveres casi en puros huesos. Se sentía como estar perdidos sin saber qué camino tomar. Sin saber cuál era el destino, porque el objetivo era encontrar al grupo. Y la preocupación era si todos estaban juntos con vida, o también se habían separado en grupos.

También tenían miedo, estaban asustados de que no fueran a encontrarlos, de si este era el momento donde debían avanzar por su cuenta. La fe es lo último que se pierde, pero la esperanza se mantiene firme.

Otra vez, buscando por un nuevo comienzo, una nueva oportunidad para vivir seguros y sin miedo. Pero el camino a esa vida siempre tiene un precio. Siempre.

Lucharon contra pequeños grupos de caminantes que les bloqueaban el paso, cruzaron por muchas tiendas vacías y a lo muy lejano parecieron ver una silueta masculina a mitad de la calle. Se acercaron despacio y tratando de ser cuidadosos, era la primera persona viva que veían desde que llegaron al pueblo.

El hombre llevaba un arco y parecía estar patrullando el lugar. Se percató del grupo de Taehyung y no dudó en apuntar con el arco.

Taehyung lo reconoció y corrió, no se preocupó por nada, solo corrió para tomar del cuello de la camiseta al chico.

—¿¡En dónde están los demás!? —el castaño le dijo a Taemin.

—C-Cómo nos encontraron...

—¡Te hice una maldita pregunta!

—¡Taehyung, detente! —Jimin lo jaló del hombro.

—La chica pelirroja está adentro con el niño. —Taemin tragó.

El castaño corrió dentro de la casa, desesperado, buscando con la mirada. —Cherry... —se lanzó a abrazarla.

—¿¡Taehyung!? ¿Cómo estás aquí? —le devolvió el abrazo.

—Los encontré... Por fin los encontramos. ¿Cómo está Shiro?

—Shiro está bien. Lo llevé adentro para que pudiera descansar.

—¿Y Jungkook?

Cherry sintió una punzada en el pecho. —Maldita sea, Taehyung. —se llevó las manos a la cabeza —. ¿Tú no estás con él?

—¿Por qué debería?

—Mierda, mierda, ¡mierda! —gritó —. Se supone que Jungkook fue a buscarte. ¡Se suponía que debían volver juntos!

—¿Qué...? —retrocedió y salió de la casa.

—¡Taehyung! ¿A dónde diablos vas ahora? —Eunwoo le gritó.

—Jungkook no está aquí. Quédense con ellos, yo seguiré buscando.

—Un momento. —lo alcanzo para jalarlo de la mochila —. Tú no iras a ningún maldito lado solo.

—¡Jungkook está allá afuera, solo!

—Ese hombre está loco. No le pasará nada, estoy seguro. Debemos organizarnos y armar un plan para avanzar. —lo miró a los ojos con las cejas fruncidas —. Vuelve adentro y aclaremos las cosas.

—Tengo que ver a Shiro. —finalizó y regresó adentro.

Al entrar dejó caer las mochilas al piso. Caminó hasta el dormitorio donde reposaba el pequeño y abrió muy despacio la puerta. Parecía estar dormido. Movió la silla a un lado de la cama para sentarse y hablarle. Shiro se veía pálido, sus manos se sentía frías, y el parche en su abdomen estaba sangrado.