DESTINY (Omegaverse)Miles G. Morales x Male Reader

EPISODIO XII

Aquí tienes la sección corregida:

-¿Puedes llamar a la policía? Tengo a un...

-Lo sé, Spider-man, ya van en camino. -Le dijo mientras tecleaba algunas cosas en el teclado de la computadora.

Había optado por un puesto como "el amigo de la silla", ayudaba a Miles a ingresar a lugares sin ser detectado, llamar a la policía, actualizar su traje y equipo o crear instrumentos que le fueran de ayuda.

Llevaba así 3 meses y enseguida sintió que hubo un cambio. No decía nada, pero le incomodaba totalmente la situación.

Él había cambiado tanto como Mile lo ha hecho también.
Él no recordaba ser así, no recordaba tratar con tanta indiferencia a Mile cuando era Spiderman.

Hace tan solo 2 semanas que había comenzado esa extraña actitud de Mile.

-¿Qué te parece si hoy salimos para... -Ni siquiera terminó de preguntarle cuando lo interrumpió.

-Hoy no, estaré ocupado en el campus y...- suspiró al escucharlo, no dejó que terminara y cortó la comunicación. Llevo una de sus manos a su rostro para arrastrarla hacia su cabello.
Sintiendo como sus manos tiemblan ligeramente.

Se recargó por completo en su silla, ansioso, mirando las pantallas de la computadora y después su mirada se posó en aquella caja de terciopelo de color negro.

Se estiró para tomarla entre sus manos y abrirla. Un anillo de compromiso de color plateado con una piedra preciosa en el centro, no era delgado puesto a que no era para una mujer, era lo suficientemente ancho y grande para las manos de Mile.

Lo había visto hace 2 semanas así que recordó lo mejor que pudo el tamaño de los dedos del Alfa. Ahorró lo suficiente con los primeros dos sueldos que ganó en su trabajo.

Es parte del equipo de científicos y hace unos días Normie le propuso ser parte de su equipo como asistente, hay un proyecto vigente que tienen que abarcar fuera del país, si acepta tiene que salir y no sabe cuánto tiempo.

Le dijo que lo pensaría y el Osborn le dio el tiempo necesario, no era urgente y debían terminar primero el proyecto con la fundación Life.

Volvió a cerrar la caja y la dejó en el escritorio, y se puso de pie, no quería sentirse abrumado y estar encerrado no le estaba haciendo bien.

Es su día de descanso, se había tomado la libertad de desocuparlo para pasar el día con Mile, siendo un sábado pensó que el Alfa podría ir a casa y pasar tiempo juntos.

Había hecho una reserva en un restaurante que miró en internet con buenas reseñas, no tenía planeado pedirle matrimonio al Alfa, quiere que ese momento sea especial y único.

Pensaría algo con más detalle, algo que lo hiciera especial y único entre ambos. Una propuesta de matrimonio en un restaurante no está en sus planes.

No pudo evitar suspirar, no quería perder la reserva por algo así, tomó su teléfono y marcó al primer número que le pareció correcto, invitarla a cenar le subiría el ánimo.

Marcó el número y el sonido de la llamada entrante se interrumpió ante la voz tranquila de la mujer.

-____ ¿Cómo estás? ¿Todo bien cariño? -Aquel tono amable fue una paz absoluta en su ser.

-Claro que sí, Río -escuchar a la mujer fue totalmente reconfortante, la visitaba seguido y no podía evitar llenarla de regalos y detalles. Al igual que el tío Aarón, aún que estos eran más sofisticados para el hombre de trabajos pesados. -¿Estás ocupada esta tarde?

-No lo creo ¿Por qué? ¿Vendrás a casa? ¿Quieres que prepare la habitación? ¿Vendrá Miles también? -Lo bombardeó con preguntas. Dio una ligera risa al escucharla.