Luna Enamorada [+18] - Completada ✅

Capítulo 2 · La tarea

Siento sus brazos alrededor de mi cintura, me está mirando fijamente con esos ojos que me tienen loca y se acerca a mi poco a poco, humedeciendo sus labios con su lengua. Yo estoy que me derrito porque al fin se cumplirá uno de mis sueños, que Henry me dé un beso. Mi primer beso.

Está muy cerca de hacerlo, a solo un milímetro, cuando tocan la puerta de mi cuarto repetidas veces y mi mamá dice...

- Luna ya está listo el desayuno, levántate que no quiero salir muy tarde.

Quiero llorar de la rabia, por la mala puntería de mi madre al despertarme. ¿No podía despertarme 10 minutos después? No. No me dejó ni siquiera saber cómo besa Henry en sueños. Me levanto molesta, pero a la vez emocionada. Hoy lo veré. Y no será un sueño.

Me meto al baño corriendo y me doy una ducha para terminar de despertarme. Salgo, me echo crema por todo el cuerpo y mi perfume favorito. Me maquillo sencillo y me arreglo el cabello pasando la plancha de pelo para alisarlo como me gusta. Me llega a la mitad de la espalda, lo tengo bastante largo. Siempre he tenido el cabello corto y ahora me lo estoy dejando crecer y me encanta como se me ve.

Voy al armario a buscar la ropa que preparé anoche. Finalmente conseguí una falda rosada de cuadros blancos que me llega sobre las rodillas y una camiseta blanca. Me pongo unos pendientes en forma de corazón pequeñitos (un amuleto a ver si hay suerte) y unas zapatillas blancas. Un estilo casual, con un puntito sexy, pero angelical. Justo lo que quería. Quiero que hoy me vea bonita, ya que siempre andamos con el aburrido uniforme de la escuela.

Salgo a la cocina preparada con mi mochila y mi madre me mira de pies a cabeza. Termina de tragar el café que se está tomando y me dice...

- ¿Y tú a dónde vas así vestida? - ruedo los ojos porque siempre que me pongo falda me dice algo. No le gusta que esté mostrando las piernas. Pero hoy lo defenderé a muerte. Es mi día de suerte, eso seguro.

- Gracias por el piropo Mamá, - le digo con sarcasmo - hay mucho calor y la verdad es que así estoy cómoda. Además, traigo un minishort por debajo por si así te sientes más tranquila. - y así consigo que me quite la mirada.

Me sirvo el desayuno y como poco, los nervios no me dejan tranquila. No puedo con la emoción de verlo hoy y ya estoy haciendo una película romántica en mi cabeza. Espero que todo salga bien.

- Y en la casa de Marta, ¿quién va a estar para vigilar? - pregunta mi madre como si fuéramos unos adolescentes irresponsables.

- Estará la mamá de Marta, ella nos dijo que nos podía ayudar con la exposición, cómo trabaja en un museo nos vendrá fenomenal su ayuda. Espero que así podamos terminar temprano. - le digo para que se calme. Ya la veo alterada porque su niña sale del nido. Marta me comentó que su madre no estará todo el tiempo con nosotros, me dijo que tenía que trabajar, pero eso no se lo diré aquí a la generala.

- Vale, me parece bien. La próxima reunión que tengan la pueden hacer aquí en la casa. - me dice.

- Ok mamá, yo le diré a los chicos. Pero primero veremos qué sale de la reunión de hoy.

Terminamos de desayunar y salimos de la casa. Ella me llevará porque me pidió que primero la acompañara a comprar unas cosas que necesitaba en un centro comercial. Estaré con ella mirando tiendas hasta las 3:00 p.m. que me dejará en casa de Marta. A este tipo de planes no me niego, siempre salgo con algo nuevo de ropa, zapatos o maquillaje.

Luego de entrar a todas las tiendas y comprar lo que mi mamá quería, nos sentamos a almorzar. Teníamos hambre por todo lo que habíamos caminado. Fue una comida agradable, mi mamá y yo nos llevamos bien. Es un poco estricta pero siempre está atenta a lo que quiero o necesito y ahora mismo nos entretenemos porque me cuenta chismes de los tíos y algunas historias de la familia. Su familia directa no es muy grande pero siempre hay algo nuevo que contar. Nos reímos un montón y la pasamos bien. Cuando terminamos salimos rumbo al coche para guardar las cosas y emprender el camino a la casa de mi compañera.