Luna Enamorada [+18] - Completada ✅

Capítulo 19 · Consecuencias

- La fiesta fue todo un éxito. Salió todo como lo planeamos hija... ¿Estás contenta? - me dice mi padre en el desayuno al día siguiente.

- Claro que estoy contenta papá, muchas gracias por todo. Te quiero - y le doy un beso.

- ¿Y para mí no hay beso? - salta mi madre.

Me acerco, la beso y la abrazo con fuerza. - Gracias mamá, eres la mejor.

Terminamos de desayunar escuchando las historias que contaba mi mamá de mis tíos, primos y familiares... Algunos bebieron más de la cuenta y fueron protagonistas de algunas escenas vergonzosas. Nos reímos como nunca. Me pongo a pensar en la noticia bomba que debo decirles y que va a acabar con esta buena vibra que tenemos y hemos recuperado, luego de mi desliz.

Todavía no se nota nada de mi embarazo de dos meses y no tengo claro cómo les daré la noticia aún. Henry quiere que se lo digamos juntos, pero no sé si será buena idea.

Los días pasan y creo que mi mamá ya se está ablandando con la idea de dejar a Henry volver a la casa y permitir sus visitas. Hoy le entregué unos chocolates de su parte y al menos se sonrío y me dijo que le diera las gracias. Creo que ha visto que nuestra relación continúa y que de verdad nos queremos.

Las náuseas han ido desapareciendo poco a poco... las he podido controlar buscando remedios por internet. Mi madre de vez en cuando me pregunta si me siento bien, tal vez esperando que le diga algo. No sé si lo hace por querer saber sobre mi salud o porque se huele algo.

Finalmente se hizo el milagro. El lunes, al salir del colegio, Henry se acerca conmigo al coche cuando mi madre llega a recogerme.

- Hola Sra. Helena, ¿cómo está? ¿Le gustaron los chocolates que le mandé con Luna? - le dice Henry emocionado.

- Si Henry, muchas gracias, estaban deliciosos. ¿Porque no te vienes con nosotras a la casa? Haré unas hamburguesas y sé que te gustan. - dice mi madre y nos quedamos un minuto procesando la información. Subimos corriendo al coche antes que cambie de opinión.

Esa tarde fue todo como antes, almorzamos y luego nos fuimos al salón a descansar. Debíamos terminar una tarea, pero lo haríamos luego. Por ahora necesitábamos estar abrazados en el sofá viendo cualquier cosa en la televisión.

- Mi amor... Ahora que tu madre me vuelve a hablar, ¿no deberíamos contarle? - me dice en voz baja.

- No lo sé. A ver, cualquier momento que escojamos será un drama, eso es seguro. ¿Pero, podemos disfrutar hasta que termine la semana antes de desatar el infierno? por favor... - le digo casi rogándole.

- Vaaaale, como quieras cariño. - y me da un beso en la cabeza y seguimos abrazados disfrutando de nuestra compañía.

- ¿Sabes?... he estado pensando que cuando tengamos al mini Henry deberíamos vivir juntos... ¿Crees que tu madre me deje venir aquí?

- Ummm eso sería lo mejor, pero no sé mi amor... Ya veremos luego como la convencemos. Primero debemos soltar la bomba.

- Si, vamos paso a paso... ¿Cómo vas con las náuseas?

- No he tenido más, menos mal... Quizás ya pasó lo peor no lo sé.

- ¿Qué quieres que sea? Yo quiero una niña igual de preciosa que tú.

- Yo quiero lo que venga... Pero puede que prefiera un niño. A lo mejor sale igualito a ti, con tus ojos... sería un príncipe rompe corazones como el padre. - me besa.

Nos quedamos toda la tarde imaginando como sería nuestro pequeño y haciendo planes de futuro juntos. No veíamos otra opción que esa. Estábamos enamorados y listos para afrontar las consecuencias.