Capítulo 21

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             Escape de la realidad

"El escape de la realidad puede brindar un respiro temporal de las preocupaciones y responsabilidades diarias, permitiendo a las personas desconectar y encontrar un espacio de calma y tranquilidad. Puede ser una forma de gestionar el estrés y recargar energías."

—— El club nocturno estaba en su apogeo a altas horas de la madrugada. El profesor permanecía sentado, bebiendo un whisky y las luces parpadeantes iluminaban la pista de baile, donde Jimin estaba terminando su show. Jungkook se quedó hipnotizado, observando cómo el rubio se movía con una gracia y una sensualidad que dejaban sin aliento a todos los presentes. La música palpitante y el ambiente cargado de deseo aumentaban la tensión entre ellos, aunque todavía no habían cruzado una palabra desde que lo había dejado en su camerino.

Jimin era una obra de arte hecha hombre y saber que todos ahí se morían por estar entre sus piernas, solo lograba aumentar la necesidad de follarlo con posesión y hacerle gritar hasta correrse.

Cuando el menor terminó su actuación, se dirigió hacia el vestuario para cambiarse. Jeon aprovechó ese momento para acercarse — Los espero en el estacionamiento — Jimin asintió y antes de irse, el mayor lo tomó por la cintura, le apretó una nalga y le dió un beso — estuviste increíble.

El más bajo se quedó sin aliento y al verlo salir, corrió a tomar sus cosas. Jin hizo lo mismo y en pocos minutos estaban listos.

Juntos, salieron del club y se dirigieron al coche de Jungkook.

— ¿Cómo planificas tus shows?

— Me siento a escuchar canciones en la madrugada después de fumar y me imagino bailándolas. Luego le envío a mi jefe el vestuario que quiero para cada uno de los días y él lo manda a buscar donde sea porque sabe que ganará dinero con eso.

— Eres sensacional.

— ¿Le gusta como bailo?

— Lo haces increíble — se acercó para hablarle al oído — y me la pones muy dura — se volvió a alejar — deberías bailarme algo.

— Cuando quiera...

— Sigo aquí... — Jin se quejó a modo de broma y los tres rieron.

Mientras conducían por las calles desiertas de la ciudad, no podían evitar pensar en lo que vendría después. La anticipación de lo que sucedería una vez que llegaran al departamento era casi tan emocionante como la tensión que se había sentido al ver a Jimin bailar.

La primera parada fue en el campus y el rubio y su amigo corrieron hasta la habitación para sacar la ropa — ¿Te verás con el profesor Kim?

— Me está llamando — hizo una seña para que hiciera silencio.

El más bajo terminó de recoger todo — Adiós, perra.

— Te amo.

— Yo igual, chupale el culo a tu hombre, no te arrepentirás.

— ¡Ya vete! — respondió desde el baño.

Jimin se rió y volvió al auto de su mayor. A penas entró le clavó un beso — Vamos a su departamento, Teacher...

Let's go, baby.

  A pesar de haber bailado toda noche, el menor seguía con energía. Puso música en el reproductor y comenzó a bailar mientras compartía con Jungkook la bebida que había comprado en el Luna Lush.

Jeon no podía dejar de sonreír ni dejar de pensar en lo hermoso que era.

Jimin se acomodó en el asiento, sintiendo la suave caricia del cuero contra su piel. Aún llevaba puesto el atuendo que usó para el show,  despertando la imaginación y aumentando la tensión.

Verbs and Moans - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora