𝗛𝗔𝗥𝗥𝗬 𝗣𝗢𝗧𝗧𝗘𝗥 || 𝑚𝑎𝑙𝑓𝑜𝑦 𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑟
[EN PROCESO]
La relación entre un Malfoy y un Potter es como el aceite y el agua. ¿Cómo se demuestra? Pues, poniendo a Danielle Malfoy en el mismo ambiente de Harry Potter.
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Ya Harry y Ron se habían reconciliado así que los cuatro volvieron a estar juntos.
Estaban en el gran comedor. Harry y Danielle estaban sentados juntos al frente de Hermione y Ron. Granger leía el diario El Profeta.
—¡Hola, Harry!— saludaron Parvati y Padma. El chico les asintió con la cabeza tomando una bebida en su taza.
Luego miró a Cho que estaba sentada con sus amigas. La asiatica fue informada por eso y lo miró con una sonrisa. Harry también lo hizo pero se le escapó el agua de la boca, mojando las piernas de Danielle y haciendo reir a las chicas.
—¡Qué asco! Eres un idiota, Harry.— se asqueó Danielle.
—¡L-lo siento yo solo...ahm...— no pudo meter excusa.
Danielle enarcó una ceja y volteó viendo a Cho hablar con las chicas entre risas.
—Ah. Veías a Cho.– acertó.— Haces todo lo posible para no gustarle.
—Cállate.
—¡Es increíble!— habló Hermione y la miraron.— ¡No puedo creer que haya escrito esto!— puso el diario en la mesa.— "La Señorita Granger, una ambiciosa chica que parece tener cierto gusto por los magos famosos. Su última presa, según nuestras fuentes, es nada más ni nada menos que el bombón búlgaro Viktor Krum. Aún no se sabe como ha tomado Potter esta decepción amorosa."— leyó molesta.
—Bueno, peor es que te emparejen con el asqueroso escupe agua que tengo al lado mío.— señaló Danielle.— Así que te compadezco, Hermione.
—¿Alguna vez pensaste que tu voz es irritante, Danielle?— la miró enojado Harry.
—¿Alguna vez pensaste que no será buena idea tener el cabello así? Tranquilamente un pájaro puede criar ahí a sus crías.
Harry iba a responder pero apareció Nigel con una caja.
—Para usted, señor Weasley.
—Oh, gracias Nigel.— agradeció Ron tomándola.
Nigel se quedó allí con una sonrisa y Hermione carraspeó la garganta.
—¿Puedo?— miró a Harry.
—No, ahora no, Nigel.— susurró Ron.— Vete...
El niño se marchó y miraron al pelirrojo.
—Le dije que conseguiría un autógrafo de Harry.— contó y abrió la embultura.— Oh, mamá fue la que me lo envió.
Sacó una ropa y se levantó para verla bien. Danielle rió al igual que Harry y Hermione.
—¡Me envió un vestido!
—Combina con tus ojos.— bromeó Harry.
—Y aquí hay otra cosa...— Danielle tomó como si fuera un pañuelo elegante colocandoselo en el pecho.— Te queda perfecto.
