𝙋𝙀𝘾𝘼𝘿𝙊 | Jason Todd

Epílogo

— EPILOGUE —

RESPIRÉ FINALMENTE DEJANDO SALIR UNA LARGA bocanada de aire que estuve conteniendo desde que repetimos la escena como por cuarta vez por culpa de Curran que comienza a reírse de la nada sin poder aguantarse.
Sin embargo, que sea el final de mi personaje me pone demasiado triste. Me reincorporé con ayuda de Curran, sabiendo que probablemente también sea la última vez que vuelva a grabar para los Titanes.
Apenas nos levantamos no pude evitar lanzarme a darle un fuerte abrazo por los hombros, cerrando los ojos de manera bruta para no largarme a llorar.

—Nuestra última escena, ¿quién lo diría? —Curran rió con suavidad, abrazando mi torso de forma dulce.

—Lo hicieron muy bien —Grant sonrió con ternura, palmeando el hombro de Curran de manera amistosa—. Dios mío, ¡por un momento casi me hacen llorar a mí!

Apreté los labios porque si digo una sola palabra soy capaz de largarme a llorar lo más fuerte que puedo, es mi primera serie oficial siendo un personaje medianamente protagonista, y debo decir que estoy orgullosa de mi actuación. He tenido apariciones en otras películas de ficción y acción, pero ninguna con una magnitud como el papel de Atenea Maximoff.

—Hey —Curran sacudió mi cuerpo entre sus brazos, tratando de despegarme de su hombro.

Negué con la cabeza aferrada a él, tengo un nudo en la garganta a causa de la emoción, miro a alguien siquiera tres segundos seguidos y me tiro del techo.
Dos brazos más se unieron al abrazo, de inmediato sentí el perfume de Brenton contra mi nariz.

—¡No llores, Nisse! —Brenton apoyó su mejilla sobre mi cabello, abrazándome con fuerza—. Estuviste maravillosa, estoy orgulloso de ti luego de todas las escenas que practicamos juntos, te dije que podías hacer esto y mucho más, odio cuando dudas de ti misma.

—¡No me digas todo eso si no quieres que llore! —me quejé separándome de los brazos de Curran para dar media vuelta y atrapar en un enorme abrazo a mi compañero favorito de set—. Gracias por acompañarme en todo este trayecto de mi primer papel profesional, esposo.

—Yo ya estoy casado, Denisse —Brenton rió apretándome con fuerza entre sus brazos—. Pero de todas formas, no es necesario que me agradezcas, después de todo ambos sabemos que eras capaz de hacerlo tú misma.

—¿Dónde está mi abrazo?

Una risa se deslizó por mis labios ante la queja de Grant. Brenton me dejó ir solo para ser atrapada por el actor de Flash, quien le importó poco mi queja y me levantó en el aire por unos pocos segundos. Pegué un pequeño grito aferrándome a sus hombros, este chico tiene la maldita costumbre de jugarme bromas todo el tiempo porque soy muy fácil de asustar; fueron varias veces las que lo vi fingir chocarae con la pared solo para preocuparme.
Ni hablar de sus caídas dramáticas, ya perdí la cuenta de los golpes que le di por darme un susto tan grande.

—Todos aquí te queremos, Denisse —Grant acarició mi espalda con suavidad—. Fue un placer haber podido trabajar contigo, eres una de las personas más dulces que conocí, aunque creo que me odias por todas las bromas que te hice.

—No te odio, Grant —solté una risita limpiándome las lágrimas de las mejillas—. Dios, claro que no te odio. Es más, aunque me cueste admitirlo, estoy segura de que voy a extrañar esas bromas.

—Ya lo sé —su tono engreído levantó mi ánimo.

—¿Ya puedo volver a abrazarla o debo esperar mucho más?

—Qué molesto —Grant murmuró en broma, liberándome de sus brazos.

Curran levantó las cejas divertidos mientras empujaba mi cuerpo contra el suyo, apoyé mi cabeza en su hombro fijando la mirada en el set con la nostalgia golpeando mi pecho. Finalmente todo había terminado, el papel por el que tanto luché y por el que trabajé noche y día para poder interpretarlo a la perfección.
Un suspiro entrecortado abandonó mis labios mientras los brazos de Curran envuelven mi cuerpo con fuerza.

—¿No te molesta esto? —mi compañero de set me miró con una mueca al tocar el corset del traje de Atenea.

—Un poco bastante, sí —asentí apretando los labios—. Pero no quiero quitármelo.

Pude cumplir mi sueño luego de tanto tiempo intentando por todos lados siendo rechazada sin parar.
Llegar hasta aquí es el orgullo más grande de mi vida, nunca me van a alcanzar las palabras para agradecer toda la confianza que pusieron en mí a pesar de no haber interpretado un papel profesional en mi puta vida.
No esperé que mi papel tuviera el impacto que tuvo en las redes, en un momento fui considerada como un personaje secundario dentro de la historia de los titanes. El guión cambió debido a la controversia que causó Atenea con Jason, terminé pasando a ser uno de los personajes más queridos dentro de la serie.

—Sabes que no te vas a poder librar de mí aunque hayamos terminado el rodaje, ¿verdad? —Curran se burló en un intento de subir el ánimo del ambiente.

—No tengo duda de eso.

Cerré los ojos cuando sentí sus manos tomando mi rostro con cuidado, acariciando mis pómulos con sus pulgares.
Sentí su frente posarse sobre la mía, y me da tristeza pensar que esto significa el cierre de nuestros personajes. Apoyé mis manos sobre las suyas, disfrutando el cálido tacto de sus manos dando pequeñas muestras de afecto que aceleraron mi corazón.
Después de todo, él siempre va a ser mi Jason Todd.

Su respiración cae sobre mi nariz, lenta y cálida, por un momento dejé de pensar en nuestro alrededor, siempre que estoy cerca suyo se siente como si él fuera el único con el poder de tener mi completa atención, y agradezco haber tenido esta oportunidad porque trajo a mi vida una de las mejores personas que puedo conocer.

Eso es todo lo que puedo pensar.

Gracias por todo, de verdad.

Gracias.