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— chaper seven —
that's not fear

"Just gonna stand there and watch me burn? [...] Just gonna stand there and hear me cry?"

📍GOTHAM, TIERRA NUEVE
Atenea Maximoff

EVITÉ SOLTAR UNA CARCAJADA ANTE LAS TONTERÍAS de Gar, es algo que extrañé el poco tiempo que estuve afuera por más que no quiera admitirlo.
Pasó un día desde que regresé, Conner se volvió loco cuando le expliqué la teoría de las diferentes tierras y todavía puedo escuchar los engranajes en la cabeza de Gar funcionando desde lejos.
Sé que están buscando una manera de detener a Jason, aunque como siempre, Dick está buscando la forma de hacerlo a su manera.

—Hey —Gar se sentó a mi lado con una enorme sonrisa—. Así que, ¿Flash?

—No vas a parar de preguntarme lo mismo veinte veces más, ¿no? —murmuré cansada, en lo que va del día ya me preguntó cuarenta veces, más o menos.

—¡Ni soñando! —carcajeó negando—. De todas formas, ¿dijiste que superó los 3 mach de velocidad? ¡Eso es muchísimo más rápido que la velocidad de la luz!

—Sí, yo-

—Hey —Dick entró a la sala, parándose frente nuestro con la impaciencia plantada en su rostro—. Creo que encontré la manera de detenerlo.

Borré toda la diversión de mi rostro para compartir una mirada seria con Gar, levantándonos del sofá para seguir a Dick.
De inmediato nos encontramos en la parte baja del edificio frente al monitor con la computadora central.

—¿Y bien? —interrogué frunciendo el entrecejo, todos a mi alrededor parecen tener la misma expresión.

—Hay una cosa que podemos usar a nuestro favor para debilitarlo —murmuró cruzándose de brazos, pasando su mirada por todos para dejarla puesta en mí.

—¿Qué? —miré a los demás confundida, notando que los ojos ajenos también pararon en mí—. ¿Por qué me miran?

—Tú eres su debilidad —Dawn abrió por completo los ojos, entendiendo.

—Esperen, ¿quieren usarme como mediadora de una especie de guerra civil entre héroes y ex héroes? —carcajeé incrédula—. No, de ninguna manera.

—Atenea, es la única forma de que nos escuche y terminemos esto de una vez —insistió Dick, tratando de convencerme con la intensidad de su mirada, pero no desistí.

—¿Por qué piensas que será distinto si voy yo? Casi muero en la explosión, ¿crees que será diferente esta vez? —discutí con terquedad, sabiendo que no es simplemente eso.

No quiero ir contra él.

—Atenea, murió gente por él; mató, manipuló y se convirtió en alguien totalmente distinto —Dawn murmuró entre dientes—. Recordemos nuestra prioridad, Jason pasó a ser un criminal y tiene que pagar por lo que le hizo a Hank, si tú vas, Jason no te lastimará, puedes decir que está herida para hacerlo bajar la guardia y atacar —la mirada determinada de Dawn se fijó en mí, tomando el mismo brillo calculador que vi en Dick en otras ocasiones—. ¡Eso es! ¡Tú eres la llave para detenerlo! Debes entregarla, él no dejará que le pase nada.

𝙋𝙀𝘾𝘼𝘿𝙊 | Jason ToddDonde viven las historias. Descúbrelo ahora