Ocean Eyes «LOOKISM»

19

Ha-yan caminaba a su salón pensando en lo que sucedió en la noche y en la tarea que se le olvidó realizar, suspiró pesado imaginando al profesor regañarla junto al resto del salón porque seguro que ninguno hizo la tarea. Cuando a su espalda escuchó el bullicio estudiantil intensificarse con rudeza, volteó por mero impulso ante el ruido y notó cómo una multitud de estudiantes se había congregado alrededor de alguien, sintió una extraña oleada de alegría invadirla, pues Daniel era el centro de atención.

A pesar de saber que Daniel eventualmente se recuperaría, la emoción la embargó. No pudo evitar sentirse emocionada y corrió hacia él con el corazón latiendo con fuerza.

El pasillo estaba abarrotado, y mientras luchaba por abrirse paso, la aglomeración la hizo tropezar.

Pero entonces, como un ángel salvador, Daniel la atrapó con sus brazos abiertos, como si estuviera ofreciéndole y esperando un abrazo.

Ha-yan se sintió aliviada, emocionada y feliz al estar de nuevo cerca de su amigo.

La escena era un cúmulo de emociones y sonrisas, y Ha-yan se sintió como si estuviera en un verdadero abrazo de la vida. Era un momento especial y conmovedor que quedó grabado en su memoria.

El abrazo no duró mucho ya que miembros de Nudillos Ardientes lo llevaron en el trono hasta su salón.

Sin más remedio fue a su salón a dejar sus pertenencias y regresó al pasillo para ir hasta el departamento de moda, para ir a ver al resto de sus amigos.

Por desgracia para su paciencia, Logan ya estaba molestando y una pelea estaba por tomar desarrollo cuando se apareció.

—¡Un hombre que no cumple sus promesas no es un hombre! —gritó entrando por la puerta de atrás sobresaltándolo, Ha-yan sacó su celular y le mostró el video que tomó de la pelea de anoche—. Se que has de tener un poco de dignidad entre tanta grasa, estúpido animal.

—Cumple tu promesa —dijo Daniel acercándose a Logan—. Usaste la mano derecha.

Logan aprovechó para insultar a Zoe frente a todo el salón, llamándola perra, y haciéndole entender que es una mujer fácil.

Ante el repentino arrebato de ira, Ha-yan no se pudo quedar quieta y caminó a él dispuesto a romperle la cara.

No obstante, Zoe la detuvo. Con la mirada le hizo entender que no valía la pena y que se quedara quieta.

Y finalmente, Logan de fue.

[Días después]

No fue mucho el tiempo que pasó para que el juicio diera lugar, el juez Mike Lee atendió el caso de Jiho Park, juntó las pruebas del intento de homicidio y de las cosas ilegales en las que se había envuelto con anterioridad, sin embargo, por ser menor de edad la condena fue de 2 años. Aunque cabe la posibilidad de realizar otro juicio si las víctimas no despiertan y de maximizar la condena.

—Has estado actuando extraño —dijo Jace

—¿Eso crees? He estado un poco ocupada y casi no duermo últimamente.

—No me refiero a eso, hay algo que no cuadra, estás ocultando algo y actúas con mucha cautela desde que Jiho casi mata a Daniel.

—Por supuesto que estoy diferente, uno de mis amigos casi mata a otro ¿Crees que no me preocupa que de ahora en adelante que cada persona que diga ser nuestro amigo sea un asesino en potencia? Debemos de cuidar en quienes confiamos, incluso si se trata de nuestros amigos.

—Claro, después de todo nuestros amigos conocen nuestras debilidades ¿No? Ya, dime de que se trata.

Lo miró indecisa, sus expresiones se transformaron lentamente.

—¿En serio quieres saber? Es de mala educación pedirle a una mujer que cuente sus secretos —dijo con un tono burlón

—Tú misma lo dijiste, debemos de desconfiar.

—Solo el día que me consideres una amenaza o que quieras que me vaya y deje de formar parte de Nudillos Ardientes, entonces descubrirás de lo que hablo.

—¿No estás exagerando? —preguntó nervioso

Se obligó a creer que es algo sumamente vergonzosos, quizá alguien finalmente la derrotó o es una decepción amorosa. Jace fingió creer que algo así pudo ser lo único que la consternaba.