10.

333 32 28
                                    

La jinete del dragón blanco.
Ariadne Whelan.

(Parte dos)

Brennan partió al amanecer

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Brennan partió al amanecer. No sin antes prometer que volvería y que guardaría silencio sobre mi existencia. La verdad es que él no tenía otra opción. Tejí dentro de su mente como una araña la necesidad de guardar mi secreto como si fuera el suyo, fue algo más fácil de lo que creí. Quizá la facilidad con la que me colaba en su mente se debía a la empatía que el sentía por mi. Marbh por otra parte era un caso muy distinto, colarme en su mente dejaba un dolor de cabeza que duraba por horas y una sensación vibrante en mis huesos como si estos estuvieran por romperse en cualquier momento. Si ese malestar lo provocaba un solo dragón, no quería imaginar lo que decenas de ellos me harían...

- Se ha marchado ya. - dijo Kalel mientras el suelo vibraba con su aterrizaje tras mis espaldas. - Ya no siento el aroma de su peste. -

- Supongo que hablas de Marbh. - dije mientras giraba y apoyaba el peso de mi cuerpo en su cara a modo de abrazo.

- Marbh... ¿desde cuándo tienes tanta intimidad con él?-

- ¿Te molesta más  que tenga cercanía con el dragón o con el jinete?- quise saber a sabiendas que me arriesgaba a otro gruñido furioso.

- No confío en ellos, Enigma. El humano puede parecerte confiable pero el dragón es diferente. Ustedes tienen sus leyes nosotros las nuestras...-

Levanté mi vista queriendo conectar mis ojos con los suyos cosa que me era imposible por la inmensa diferencia de estatura apenas pude ver un punto de escamas blancas en su frente.

- Vi el interior de Brennan , no hay rastro de maldad. Resulta que al final no soy el único enigma aquí...-

- ¿A qué te refieres?- preguntó con su voz ronca colándose en mi mente buscando algún rastro de un peligro que no supe identificar.

- Que él me parece un enigma. Nunca antes había conocido un hombre que no tuviera maldad en su interior...-

- Está entrenado para engañar.-

- No a mí. No puede engañar a alguien que vio hasta el más antiguo de sus recuerdos.-

-¿Qué te asegura que no vendrá junto a más dragones a darnos caza? Él está entrenado para proteger su mente de los intrusos, tal vez viste lo que él deseó mostrarte...-

- Sé que no. De todas maneras implanté en su ser la necesidad de protegerme, estoy convencida... ni siquiera torturándolo confesará nuestro paradero.-

Corazón traidor. (Fourth Wing fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora