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A través de mis ojos .

(parte dos)

La noche llegó y con ello la temperatura descendió a lo que Ariadne consideró el punto más bajo en los meses que llevaba habitando ese templo de piedra, a pesar de haber usado algunas runas para conservar el calor del interior no podía evitar sent...

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La noche llegó y con ello la temperatura descendió a lo que Ariadne consideró el punto más bajo en los meses que llevaba habitando ese templo de piedra, a pesar de haber usado algunas runas para conservar el calor del interior no podía evitar sentir como la sensación de escalofríos se colaba hasta sus huesos por debajo del suéter de lana que tenía puesto. En momentos como aquellos no podía evitar preocuparse por los niños y tampoco por Kalel, creía firmemente que la bestia albina era quien más padecía el habitar ese lugar en esa temporada, las bajas temperaturas no eran gentiles con la bestia de fuego...

Siendo presa de ese sentimiento de preocupación ,Ariadne buscó la mente de Kalel en medio de esas ramificaciones que formaban las mentes del resto de animales del bosque y pronto lo encontró , dormía plácidamente en lo profundo de una cueva y gracias a que había levantado varios sellos y otros trucos mágicos las bajas temperaturas no eran un impedimento para que pudiera descansar cómodamente esa noche, además el saberse triunfador en ese reto que tanto ella como Brennan habían acordado lo había llenado de un orgullo que no había intentado ocultar, el saberse preocupada por él y descubrir que la bestia descansaba en paz la llenó de diversión y un profundo alivio... algo menos de que preocuparse esa noche...

Ariadne Aisereigh... el resultado final de ese reto improvisado entre jinetes había concluido con el derecho de adoptar ese nombre como suyo. Ariadne Aisereigh la primera de su nombre, la matriarca de una nueva familia... una risilla corta se escuchó en lo profundo del interior de la mente de la pelirroja, le resultaba divertido referirse a si misma de la misma manera en que nombraban a la realeza cuando recalcaban uno por uno los tantos títulos que les otorgaban las largas generaciones que los conformaban.

 Estaba muy lejos de asemejarse a la realeza estaba muy consciente de aquello, pero la vaga idea de que pudiera existir un linaje honorable a partir de ella le resultaba un deseo lejano, uno que no sabía que tenía hasta ahora. Si una generación brillante pudiera nacer de alguien tan oscuro sería un milagro... los dioses ya le habían concedido uno con Kalel, quizá no era una idea tan disparatada, ya tenía las alas entonces una familia con su nombre también podría existir en el futuro...

Pero para comenzar una familia tenía que existir un bebé y ella bien sabía de que manera se creaba uno y la sola idea de ser tocada de esa manera nuevamente le generaba miedo y repulsión, no deseaba repetir esas acciones nunca más.

Un brisa fría la hizo encogerse en su asiento de madera y regresar la atención al libro de herbolaria que leía por tercera vez en esa semana, quería memorizar las maneras de cultivar alimentos en ese clima hostil, sus distintos usos y peligros a los que tendría que anteponerse. Quería creer que a ese punto ya era casi una experta en plantas , pero no debía confiarse en cualquier momento algo malo podría ocurrir...

Corazón traidor. (Fourth Wing fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora