"Sombras y Destellos"

Capítulo 16: Un rayo de luz en las tinieblas

Después de una mañana llena de clases y pensamientos tumultuosos, Lucía esperaba ansiosa el momento de encontrarse con Samuel en el estudio de grabación. Habían acordado que él la recogería después de la escuela para que pudiera escucharlo cantar, y ella no podía contener la emoción que sentía.

Cuando el timbre de la escuela sonó, Lucía salió corriendo hacia la salida, apenas pudiendo contener su entusiasmo. Samuel estaba esperándola afuera, con una sonrisa cálida y acogedora en el rostro que la hizo sentirse instantáneamente más tranquila.

**Samuel:** "Hola, Lucía. ¿Lista para ir al estudio?"

**Lucía:** "¡Claro que sí! Estoy emocionada por escucharte cantar."

El camino hacia el estudio pasó volando entre risas y charlas animadas. Lucía se sentía como si estuviera flotando en una nube de felicidad, completamente absorbida por la emoción del momento.

Al llegar al estudio, Samuel la llevó hasta la sala de grabación, donde había preparado todo para la sesión. El ambiente estaba cargado de electricidad, y Lucía podía sentir la energía palpable en el aire mientras se acomodaba en una silla frente a los altavoces.

Con un gesto de complicidad, Samuel tomó el micrófono y se preparó para comenzar. Lucía contuvo el aliento mientras lo observaba con admiración, sintiendo un hormigueo de anticipación recorrer su cuerpo.

Y entonces, la música comenzó a llenar la habitación, envolviéndola en una ola de sonidos cautivadores. La voz de Samuel era pura magia, flotando en el aire como una melodía celestial que tocaba el corazón de Lucía en lo más profundo.

La canción hablaba de esperanza y redención, de encontrar la luz en medio de la oscuridad. Pero lo que más llamó la atención de Lucía fue una línea en particular que mencionaba a una chica llamada Sofía, a quien se le prometía amor eterno.

Mientras escuchaba, Lucía se quedó pensando en el nombre Sofía y por qué Samuel había elegido ese nombre en particular. Una sensación de intriga y confusión se apoderó de ella, y se preguntó si había algún significado oculto detrás de esa elección.

A pesar de la confusión que la invadía, Lucía se dejó llevar por la belleza de la música y la voz de Samuel. Era como si cada nota resonara en su alma, llenándola de una sensación de paz y serenidad que no había sentido en mucho tiempo.

Cuando la canción llegó a su fin, Lucía se encontró aplaudiendo emocionada, con lágrimas de felicidad brillando en sus ojos. Samuel la miró con una sonrisa radiante, y en ese momento, supo que había encontrado algo especial en él, algo que trascendía las palabras y los gestos.

Con el corazón rebosante de gratitud y amor, Lucía se acercó a Samuel y lo abrazó con fuerza, sintiendo que en sus brazos encontraba un refugio seguro en medio del caos del mundo exterior. Y en ese abrazo, encontró la certeza de que, pase lo que pase, siempre habría luz en la oscuridad.

Después de la emotiva sesión en el estudio, Samuel y Lucía salieron a disfrutar de unas deliciosas hamburguesas en su lugar favorito. Entre risas y conversaciones animadas, compartieron momentos de complicidad y alegría que quedaron grabados en sus corazones.

Al finalizar la cena, Samuel acompañó a Lucía hasta la puerta de su casa. El suave murmullo de la noche envolvía la calle mientras se detenían frente a la entrada.

**Samuel:** "Gracias por acompañarme hoy, Lucía. Fue realmente especial tenerte allí."

Lucía sonrió, sintiéndose abrumada por la calidez de las palabras de Samuel.

**Lucía:** "Gracias a ti por invitarme. Fue una experiencia increíble escucharte cantar."

En un gesto tierno y lleno de cariño, Samuel se inclinó y depositó un suave beso en la frente de Lucía. Un cálido hormigueo recorrió la piel de Lucía, dejando una sensación reconfortante en su corazón.

**Samuel:** "Buenas noches, Lucía. Descansa y sueña con las estrellas."

Con una última sonrisa, Samuel se alejó por la calle, dejando a Lucía parada en la entrada de su casa, con el corazón palpitante de emoción y felicidad. Aquel momento quedó grabado en su memoria como uno de los más especiales de su vida, una muestra de la conexión única que compartía con Samuel.