"Sombras y Destellos"

Capítulo 57: La Sorpresa

La semana pasó rápidamente para Lucía, quien se sumergió en sus estudios y actividades cotidianas para mantener su mente ocupada. Alejandro fue un apoyo constante, acompañándola en sus momentos de dudas y preocupaciones. Aunque no pudo evitar pensar en Samuel, sus padres y Ximena, decidió no comunicarse con ninguno de ellos durante la semana, queriendo que su llegada fuera una sorpresa total.

El viernes por la tarde, Lucía empacó sus cosas con una mezcla de emoción y nerviosismo. Estaba ansiosa por ver a su familia y a Samuel, esperando que su llegada inesperada les trajera alegría y, quizás, las respuestas que tanto buscaba.

**Alejandro:** "Lucía, ¿estás segura de que no quieres que vaya contigo al aeropuerto? Puedo ayudarte con las maletas."

**Lucía:** "Gracias, Alejandro. Pero creo que necesito hacer esto sola. Quiero que todo sea una sorpresa. Además, prometiste cuidar mi planta mientras estoy fuera, ¿recuerdas?"

**Alejandro (sonriendo):** "Lo sé, lo sé. No te preocupes, tu planta estará en buenas manos. Sólo... prométeme que me mantendrás al tanto cuando llegues."

**Lucía:** "Lo prometo. Gracias por todo esta semana, de verdad."

Se dieron un abrazo fuerte y Alejandro la ayudó a cargar sus maletas hasta el taxi. El viaje al aeropuerto fue tranquilo, aunque Lucía no podía dejar de sentir mariposas en el estómago. Mientras esperaba su vuelo, repasó mentalmente lo que diría a cada uno, buscando las palabras adecuadas para expresar todo lo que sentía.

Finalmente, el avión despegó y, tras unas horas, Lucía aterrizó en su destino. Tomó un taxi hacia la casa de sus padres, mirando por la ventana con una mezcla de nostalgia y anticipación. Al llegar, vio la casa familiar desde el taxi y respiró hondo antes de bajar.

**Lucía (pensando):** "Espero que esto salga bien."

Llamó a la puerta, y tras unos momentos, su madre abrió, con una expresión de total sorpresa y alegría.

**Madre de Lucía:** "¡Lucía! ¡No puedo creer que estés aquí!"

La abrazó con fuerza, y pronto su padre apareció detrás de ella, igualmente sorprendido y feliz.

**Padre de Lucía:** "¡Hija! ¡Qué sorpresa tan agradable! ¿Por qué no nos avisaste?"

**Lucía:** "Quería darles una sorpresa. Los he extrañado tanto."

Después de un emotivo reencuentro con sus padres, Lucía les explicó que también quería ver a Samuel y aclarar algunas cosas. Sus padres compartieron una mirada de complicidad y tristeza, pero no dijeron nada.

**Lucía:** "Voy a ver a Samuel ahora. Necesito hablar con él."

**Madre de Lucía:** "Está bien, cariño. Ve con cuidado."

Lucía salió de la casa y se dirigió hacia el lugar donde sabía que encontraría a Samuel. Mientras caminaba, su mente se llenaba de preguntas y ansiedades. Finalmente, llegó a la casa de Samuel y llamó a la puerta, su corazón latiendo con fuerza.

Para su sorpresa, nadie respondió. La puerta estaba entreabierta, así que entró con cautela. El interior de la casa estaba sucio y cubierto de polvo, como si no hubiera sido habitada en mucho tiempo. El silencio era inquietante.

**Lucía (en voz baja):** "Samuel... ¿estás aquí?"

Recorrió la casa, sintiendo una creciente inquietud. Había una capa de polvo en todas las superficies, y algunos muebles estaban desordenados, como si alguien hubiera salido apresuradamente.

Finalmente, encontró a Samuel en el salón, sentado en el sofá. Parecía distante, perdido en sus pensamientos.

**Samuel (mirándola con sorpresa):** "Lucía... ¿qué haces aquí?"

**Lucía:** "Quería sorprenderte. ¿Por qué está todo así? ¿Qué está pasando, Samuel?"

Samuel la miró con tristeza, pero también con una determinación que ella no había visto antes.

**Samuel:** "Hay muchas cosas que necesitas saber. Pero lo más importante es que quiero que sepas que te amo. Pase lo que pase, siempre estaré contigo, incluso si no puedo estar físicamente a tu lado."

**Lucía:** "No entiendo, Samuel. ¿Por qué no puedes estar físicamente a mi lado? ¿Qué está pasando?"

Antes de que Samuel pudiera responder, alguien tocó la puerta. Samuel pareció ponerse nervioso de repente y desapareció de la sala, dejando a Lucía confundida y preocupada.

Con el corazón latiendo con fuerza, Lucía decidió regresar a casa de sus padres para explicar lo sucedido. Al llegar, les contó lo que había ocurrido, pero sus padres simplemente le dijeron que a lo mejor Samuel tenía algo que hacer o que necesitaba descansar.

**Padre de Lucía:** "No te preocupes, Lucía. Todo estará bien. Mejor ve a descansar, mañana será otro día."

Lucía asintió, pero en su interior, la preocupación seguía creciendo. ¿Qué estaba sucediendo realmente con Samuel?