Capítulo 35: Reencuentros y Nuevos Comienzos

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Con Samuel ya fuera del hospital y en proceso de recuperación, Lucía sintió un resurgimiento de esperanza y energía. Sin embargo, sabía que su propio camino hacia la sanación también debía continuar. Había dedicado tanto tiempo y esfuerzo a cuidar de Samuel que había descuidado su propia salud emocional y mental. Ahora, era momento de equilibrar las cosas y encontrar un nuevo propósito para ella misma.

Después de una mañana tranquila en casa, decidió dar un paseo por el parque cercano. El sol brillaba con fuerza y el aire fresco de la primavera le dio una sensación de renovación. Mientras caminaba, su mente se llenaba de recuerdos y pensamientos sobre todo lo que habían pasado juntos. Aunque habían sido tiempos difíciles, también habían demostrado la fuerza de su amor y su capacidad para superar cualquier adversidad.

Lucía se detuvo en un banco bajo un árbol frondoso, permitiendo que la luz del sol se filtrara a través de las hojas y creara un hermoso juego de sombras en el suelo. Cerró los ojos por un momento, disfrutando de la paz del entorno.

*Lucía (pensando):* "¿Cómo he llegado hasta aquí? A veces, siento que he estado viviendo en un sueño. Pero es real. Todo lo que hemos pasado es real. Y ahora, es momento de empezar de nuevo."

Mientras estaba sumida en sus pensamientos, una voz familiar la sacó de su ensoñación.

*Samuel:* "¿Lucía?"

Abrió los ojos rápidamente y vio a Samuel caminando hacia ella. Se veía mejor de lo que había estado en meses, con una sonrisa genuina y un brillo en sus ojos que no había visto en mucho tiempo. Se levantó del banco y corrió hacia él, lanzándose a sus brazos. Se abrazaron con fuerza, sintiendo la calidez y el amor que compartían.

*Lucía:* "Samuel, estoy tan feliz de verte así."

*Samuel:* "Todo gracias a ti, Lucía. No sé cómo agradecerte por todo lo que has hecho por mí."

Se separaron un poco, aunque sus manos seguían entrelazadas.

*Lucía:* "No tienes que agradecerme. Lo hice porque te amo. Pero también tengo que empezar a cuidar de mí misma. He pasado tanto tiempo preocupándome por ti que olvidé que también necesito atención y cuidado."

Samuel asintió, entendiendo perfectamente lo que ella quería decir.

*Samuel:* "Y te apoyaré en eso, Lucía. Al igual que tú has estado ahí para mí, yo estaré aquí para ti. Ambos necesitamos sanar y crecer juntos."

Decidieron continuar su paseo por el parque, disfrutando del momento y de la compañía del otro. Hablaron de sus planes para el futuro, de cómo podían apoyarse mutuamente en sus respectivas recuperaciones. Lucía mencionó su intención de volver a la escuela y retomar sus estudios, mientras que Samuel compartió sus metas para seguir con su terapia y encontrar nuevas formas de mantenerse sobrio y saludable.

*Samuel:* "Quiero hacer música de nuevo, Lucía. Pero esta vez, quiero que sea diferente. Quiero que sea una forma de expresar todo lo que hemos pasado, todo lo que hemos aprendido."

*Lucía:* "Eso suena maravilloso, Samuel. La música siempre ha sido una parte importante de nuestras vidas. Y estoy segura de que crearás algo hermoso."

Mientras caminaban de regreso a la casa de Samuel, notaron un pequeño café en la esquina. Decidieron entrar y tomarse un descanso. El lugar era acogedor y lleno de vida, con el aroma del café recién hecho llenando el aire. Se sentaron en una mesa junto a la ventana y pidieron dos tazas de café.

*Samuel:* "¿Recuerdas la primera vez que vinimos a un lugar así? Estábamos tan nerviosos, pero fue uno de los mejores días de mi vida."

*Lucía:* "Sí, lo recuerdo. Fue cuando me di cuenta de cuánto te amaba. Y ese amor no ha hecho más que crecer con el tiempo."

Samuel sonrió y tomó la mano de Lucía, apretándola suavemente.

*Samuel:* "Hemos pasado por tanto, Lucía. Pero cada desafío, cada obstáculo, nos ha hecho más fuertes. Estoy listo para empezar de nuevo, contigo a mi lado."

Lucía sintió una oleada de emoción y gratitud. Por primera vez en mucho tiempo, sentía que las cosas iban a estar bien. Sabía que aún había mucho trabajo por hacer, pero también sabía que con Samuel a su lado, podían superar cualquier cosa.

Después de terminar sus cafés, decidieron regresar a la casa de Samuel. Pasaron la tarde hablando y riendo, disfrutando de la compañía del otro y de la tranquilidad del momento. La madre de Samuel los observaba desde la cocina, con una sonrisa en el rostro y lágrimas de alegría en los ojos.

*Madre de Samuel:* "Estoy tan agradecida de que hayan encontrado su camino de regreso el uno al otro. Son la fuerza y la esperanza que Samuel necesita."

Cuando cayó la noche, Lucía se preparó para irse a casa. Samuel la acompañó hasta la puerta y la abrazó una vez más.

*Samuel:* "Gracias por estar aquí, Lucía. Eres mi luz en la oscuridad."

*Lucía:* "Y tú eres mi fuerza, Samuel. Siempre estaré aquí para ti."

Se despidieron con un beso suave, sabiendo que el camino hacia la sanación era largo pero que estaban dispuestos a recorrerlo juntos. Mientras Lucía caminaba de regreso a su casa, sintió una nueva sensación de esperanza y determinación. Estaban listos para enfrentar el futuro, juntos, con amor y fortaleza.

La vida les había dado una segunda oportunidad, y no pensaban desaprovecharla. Con cada paso que daban, sabían que estaban construyendo un futuro mejor, lleno de amor, esperanza y posibilidades infinitas.

"Sombras y Destellos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora