30. Sin importar que.

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—Te lo vuelvo a repetir Jane. ¿Quien es Jay?

—Es el chico con el que salí hace tiempo. -Respondí, me sentía amenazada por la fría mirada con la que me miraba Levi.

Levi me miro mal -¿Porque te dice esto?

El me entregó el celular y me mostro, el mensaje decía "¿Que sucede? ¿No me enviaras nada?"

—¿Que tenías que enviarle? -Preguntó, yo aun temblaba y mis músculos estaban tensos.

—La tarea. -Trague saliva.

El se quedó serio viéndome fijamente en silencio. —Bueno, entonces si dices la verdad -Pauso —Desbloquea el celular.

—¿Porque debería de hacer eso? -Pregunté, no sabía que podría hacerme si miraba la verdad.

—Hazlo.

Ya me estaba poniendo los pelos de punta el como se estaba dirigiendo a mi, bufé y coloque mi huella en el celular. El me lo arrebató y comenzó a revisar, miraba como su pulgar subía y en sus ojos se reflejó la foto de Jay.

El me miraba con el ceño fruncido y demostrando irá, arrojó el teléfono al suelo enojado. Yo solo vi mi celular hecho pedazos en el suelo y luego lo mire a el.

El se tapó la cara como si lo que hubiese hecho fuera algo tan grave y tan fuerte. No sabía porque tenía tanto enojo si al fin y al cabo ni le mande la fotografía.

—¿Que te sucede? -Pregunté confundida.

—No, ¿Qué te sucede a ti? -Hablaba fuerte y muy enojado.

—No entiendo tu furia.

—Jane yo pensé que esa foto era para mi. -Se miraba que había dañado su ego -Pero sólo fue una estúpida equivocación.

—Yo...

—¿Tu qué? Tu no sabes lo que me sucede, tu no sabes lo que siento, tu no vez que para mí eres más que una aventura...

—Me hablas como si fuera una cualquiera.

El bufo, froto sus ojos estresado. Después de estar en silencio un rato se acercó a mi —Dime Jane ¿Qué soy yo para ti?

Yo no podía responder, tenía un nudo en la garganta, permaneci mirándolo a los ojos.

—Dime que soy algo más para ti además de tu jefe, por favor...

Yo aún no podía responder porque no sabía que éramos, no tenía ni idea que tipo de relación había entre nosotros. No sabía si éramos pareja, amantes, asistente y jefe o simples conocidos con deseo el uno al otro.

El me acariciaba la mejilla con su pulgar, acunando mi rostro en su mano. Yo aún no tenía palabras por decir, solo lo miraba.

El suspiro rendido se separó de mi dándome la espalda recogió todas sus cosas de forma apresurada. No me miro por última vez, solo se fue no antes de haber azotado la puerta.

Trague saliva, no podía creer que lo había sucedido. Me quedé viendo el suelo y con dificultad me senté en el sofá. Viendo a mi alrededor, Erwin dormidote y mi teléfono estaba hecho pedazos.

Moví a Erwin tratando de despertarlo, después de varias agitaciones el despertó y me miro confundido.

—¿Que pasó?

—Nada, solo vete a dormir a tu recámara.

El se levantó adormecido y subió las escaleras lentamente. Yo limpie un poco y recogi mi teléfono el cual ya ni encendía.

❝ Nudes | Levi Ackerman ❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora