Amor Peligroso {1}

Verdad descubierta

Adelaida

—"Cómo pudiste"—escucho gritar a Ricky mientras me empuja al otro lado de la cama.

Abro los ojos sin entender qué demonio estaba pasando. — "¿Qué pasa?". — pregunté.

—"Tienes el descaro de preguntar eso". — Se aleja de mí, me siento en la cama.

—"Ricky, ¿qué demonio pasa de verdad?"

—"Por qué demonio lo haces, que es lo que quieres de mí". — No tenía idea por qué estaba hablando así.

—"No te estoy entendiendo". — Me tira el teléfono, lo tomo y veo el mensaje, mi corazón casi se paraliza.

—"Por qué dime, ¿por qué demonio hace esto?" — Me paré de la cama.

—"Puedo explicarlo, Ricky". — Camine hacia él. Intente tocarlo, pero él se alejó de mí.

—"No quiero las manos de una traicionera sobre mí.— Sus palabras me dolían más de lo que podía imaginar.

—"Ricky, por favor". — Suplique.

—"Si quería aliado era fácil robártelo, pero dime por qué demonio te acostaste conmigo". — No respondí. No tenía idea cómo decirlo.

Me tomó de barbilla, obligándome a que lo viera a los ojos. — "Dime, por qué demonio, ¿qué era lo que quería lograr?"

—"Que te enamorara de mí".— dije. Me soltó y se alejó de mí.

— "Porque necesitaba eso, róbate mi aliado sin necesidad de mí"

—"Déjame explicártelo".— Dije con voz temblorosa. Mis ojos empezaban a arder.

—"No. no quiero escuchar lo que salga de tu mentirosa boca".

Miré cómo empezó a caminar de un lado a otro con las manos en forma de puño. Se detuvo tan repentinamente que cuando me miró todo mi cuerpo se paralizó.

—"Me ibas a matar, ¿verdad?". — Su pregunta hizo que mi corazón quisiera salirse de mi pecho. —"Ese era tu plan todo este tiempo, matarme". — Bajé la cabeza y me quedé en silencio. —"Respóndeme maldición"

—"Sí".— Grite. — "Fui a tu oficina a matarte pero cuando te vi mis planes cambiaron. Entonces, decidí que la mejor manera era que tuviera enamorado de mí para luego matarte".

Miro cómo se pasa una mano por el cabello. Lo escucho reírse, no sé por qué demonio se estaba riendo en un momento así.

—"Eres la peor personas, qué culpa tenía mi jodido corazón con tus planes". —Camino hacia la mesita de noche, mire cómo tomo su pistola antes de empezar a caminar hacia mí.

—"Tómala, mátame, completa el último paso de tu puto plan". — Me toma la mano poniéndome la pistola en ella. Luego la colocó sobre su corazón.

—"Dispara, hermosa, vamos, hazlo".— No podía, no tenía idea por qué demonio no podía solo apretar el gatillo y todo habría terminado. Deje caer la pistola en su mano.

—"¿Qué pasa porque demonio no dispara?".

—"No puedo".— Dije mientras mis lágrimas amenazaban con deslizarse  por mi cara.

—Todo de ti es una puta mentira". — Apunto la pistola hacia mí. —"Dame una maldita razón para no matarte ahora".— dijo mientras colocaba la pistola en mi frente.

—"No hay razones, si quieres mátame".—dije, mirándolo directamente a los ojos.

Bajo su pistola. —"Te quiero lejos de mí, si vuelve a acercarte a mí no dudaré en matarte con mi propia mano".

Miré cómo empezó a recoger su ropa. —"Cuando salga del baño, no quiero verte aquí". — Y así lo vi marcharse hacia el baño.