Septiembre 8
Por un momento tuve la certeza de que me había olvidado como pintar.
Como crear algo lindo.
Lleno de vida.
Supongo que perdí aquello al igual que tu perdiste la memoria.
Pero entonces viniste a la habitación blanca.
Supe el momento en el que llegaste a casa, siempre soy capaz de adivinarlo, siempre estoy despierta hasta que te escucho llegar.
Y solo me permito intentar conciliar el sueño cuando la puerta de la que era nuestra habitación se cierra.
Era extraño no saber cómo actuar a tu alrededor, cuando antes estar contigo era algo natural.
Pero entonces, no se como, estábamos pintando.
Y mi mano estaba sobre la tuya.
Y sentí el calor de tu piel.
Y el olor de ese perfume que usabas que me volvía loca.
Y..., de repente sentí esperanzas.
Esperanzas de que tal vez..., solo tal vez, podíamos recuperar aquello que habíamos perdido.
Y sabes lo que dicen de la esperanza, ¿no?
Que es peligrosa, pero cuando se trata de ti, nunca me importo arriesgarlo todo.
Septiembre 14
Observo el vestido blanco que use la noche que me pediste que me casara contigo.
Me he tomado la libertad de pintarlo con unos acrílicos que encontré en uno de los cajones.
Me ha quedado precioso.
¿Y sabes que creo? Que esta noche puede ocurrir un milagro.
Por que este vestido es mágico, ¿no crees? Algo increíble pasó la primera vez que lo use y algo me dice que tal vez..., solo tal vez, otro milagro ocurra esta noche.
Solo estoy ansiosa por descubrir lo que nos espera.
Estoy ansiosa por descubrir cómo se desarrolla todo un año después de que nos conocimos.
Dios..., te amo Taylor.
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El día que dijimos adiós
RomanceSoy una persona a la que no escucharás quejarse de la vida que lleva: Tengo el trabajo de mis sueños y mi carrera en la firma de abogados solo va en ascenso. Acabo de ganar un juicio que me dejará en las grandes ligas. Estoy pensando en proponerle m...