CAPÍTULO CUARENTA Y TRES

5.1K 700 287
                                    


11 de Junio 


Esa noche no soy capaz de dormir.

Cuando llego al hotel me siento en la pequeña mesa y me limito a simplemente mirar por el ventanal que da a un pintoresco parque en frente.

El atardecer es precioso y me deleito con los colores pintados en el cielo.

De repente me invade el olor a pintura de un recuerdo lejano que se me escapa.

Estoy acostumbrado a esa sensación.

Estoy acostumbrado a no recordar, a no lograr aferrarme a los recuerdos, a los vistazos de una vida pasada.

Lo intente con mucho ahínco todos estos años, visite numerables especialistas, pero respondieron que simplemente a veces los recuerdos no vuelven, no hay un medicamento que pueda revertir aquello. Por lo que en un momento dado me resigne a simplemente esos segundos de recuerdos que como llegan se van.

Me quedo sentado en el pequeño sillón mirando el parque hasta que el cielo se oscurece y la gente desaparece.

Me doy cuenta que en este lugar se perciben más estrellas que en donde vivo, supongo que por que no hay tanta contaminación lumínica.

«Alex tiene un hijo»

Se que tengo mensajes de Celie en el teléfono, Leo me llama un par de veces, pero me limito a simplemente mirar por el ventanal.

Sigo pensando sin parar en mi pasado.

Creo que no soy capaz de descifrar cual es el ultimo recuerdo que tengo.

¿Ya había terminado las cosas con Celie? ¿Vivía solo?

«Alex tiene un hijo»

Me pregunto donde estaría ahora si las cosas con Alex no hubieran terminado.

Me pregunto una y otra vez si dejarla hacer su camino en realidad fue el error más grande de mi vida.

Me pregunto si la persona vacía y rota que era hubiera logrado hacerla feliz.

Me pregunto si obligarla a que se quede conmigo no hubiera hecho que terminara despreciando a aquel hombre que tan feliz había logrado hacerla.

Estoy seguro que todo lo que hice fue pensando en ella, porque la verdad es que sentía —y siento— que no tenia nada para ofrecerle y sentía que era muy egoísta de mi parte simplemente tomar todo lo que tuviera ella para darme.

No sabía como ser el Taylor del que ella se había enamorado.

No se si dejarla ir fue el acto más cobarde que hice o el acto de amor más grande.

«Alex tiene un hijo»

Siempre tuve algo dentro mío que me gritaba que la buscara, que fuera por ella, pero también estaba otra esa parte que se sentía insuficiente.

Me pregunto como arreglar todos los errores que cometí en el pasado.

Me pregunto si hay un manual para vivir la vida y si lo hay, me pregunto donde mierda puedo conseguirlo, porque honestamente no sé como demonios seguir con mi vida.

No se como actuar, que pensar o como comportarme.

«Alex tiene un hijo»

«Alex tiene un hijo que tiene los ojos verdes»

«Alex tiene un hijo que tiene los ojos verdes y se llama Oscar»

No puedo evitar rememorar una y otra vez todo lo vivido desde que llegue.

El día que dijimos adiósDonde viven las historias. Descúbrelo ahora