El día que dijimos adiós

DIARIO DE ALEX

17 de Julio

¿Crees que las personas morir de amor? ¿Crees que un cuerpo puede enfermar luego de que le rompieran demasiadas veces el corazón?

No lo sé, Tay, pero creo que mi cuerpo ya no puede soportar demasiado dolor.

Es la única explicación que encuentro para sentirme de la manera en la que me siento.

Y en un vago intento de distraerme un poco, voy a decirte algo que nunca te conté sobre mis padres: en el accidente de auto, mi padre murió en el acto.

Mi madre logró vivir casi una semana más.

Tenía quince años cuando aquello pasó.

Quince años cuando mi mundo entero se arruinó, cuando todos mis sueños, o todos los que puede tener una niña a esa edad, se fueron abajo.

Logre estar con mi madre la única vez que despertó.

Ella solo abrió los ojos y lo supo, como si hubiera algo en su cuerpo que le dijera que mi padre ya no estaba.

Fue como si algo dentro suyo se hubiera roto, vaciado.

Te digo esto por que lo sé, lo vi.

Sus ojos ya no brillaban y ella solo me dejo llorar en silencio en su pecho unos cuantos momentos antes de volver a dormirse.

Me regaló esos pocos minutos de lucidez.

Creo que en el fondo ella lo sabía Tay, ella sabía que no iba a vivir.

Ella sabía que no podía vivir en un mundo en el que mi padre no estuviera.

Y si me lo preguntas a mi, Tay, creo que mi madre murió por amor.

Murió porque una parte de ella había muerto con mi padre y creo que ella sabía que no podía vivir sin él.

Voy a confesarte que al principio la odie, la odie como una chica de quince años puede odiar al mundo entero cuando todo se le es arrebatado, pero la odie más porque me hizo sentir que no era suficiente, que si bien me amaba más que a su vida, el amor que sentía por mi padre era diferente.

Como un órgano vivo.

No mentía cuando te lo dije antes de que te fueras de casa con Oscar, lo que siento por ti se siente como algo vivo.

Y si, supongo que más de una vez quise arrancarme ese sentimiento del pecho, del alma.

De todas maneras me considero más fuerte que mi madre, siempre supe que si arrancaba ese pedazo de ti de mi, no hubiera sido una buena madre para Oscar.

Se que no lo tienes claro, pero te juro que veras lo bien que he criado a nuestro hijo.

Han pasado dos horas desde que se fueron y la casa nunca había estado tan silenciosa.

Mickey parece igual de taciturno que yo, pero por más que siempre lo supe, Oscar es la persona que pone a dar vueltas el carrusel de nuestras vidas, y sin él...

Se que esta en buenas manos.

A pesar de todo, confío en ti.

Confío en ti, Taylor.

18 de Julio

Bueno, no mentía antes cuando pregunte si creías que alguien podía enfermar por amor.

Si, lo sé, demasiado dramática para mi propio bien.

Peor bueno, la cuestión es..., estoy enferma.