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🌎 Capítulo 8

SANDRA

- ¿Me crees si te digo que me ha tocado una chica súper pedante? - Andy se levantaba de su asiento para enseñarme su carta - es la primera carta que recibo de ella y me dice esto.

Agarré el folio y comencé a leer. "Me da toc si pones el nombre a la izquierda". "¿Eres rubia? Prefiero tener amigas morenas".

- ¿Y qué pasa que seas rubia? - me reí bajito y miré a Andy, la cual estaba con los brazos en jarra y resoplando.

- Pues eso me pregunto yo - frunció el ceño y agarró la carta - esa se va a enterar, pienso poner mi nombre a la izquierda en todas las cartas y como vuelva a decir algo más sobre mí pelo...

- ¡Buenos días clase! - al entrar nuestro profesor de inglés, Andy se fue frustrada a su asiento, colocando la carta de malas maneras sobre la mesa - hoy veremos los futuros, aunque en realidad gramaticalmente no hay futuros, pero bueno... ¡En fin! Para eso me pagan - dijo por lo bajini.

Miré a Andy y no pude evitar pensar en Jack. Él no era borde y parecía ser un buen chico. Lo notaba en sus cartas. Aun no le había contado a Andy quien era mi amigo por correspondencia. Y creo que hoy no era buen momento.

No presté atención a la clase. Mi mente se distraía pensando en él. Me acordé de sus palabras, esas que decían que las cartas eran peor que la droga. Ahora era yo la que tenía mono por saber más de él.

Las clases terminaron pronto y para mi sorpresa ni Tiffany ni Keyti habían venido. Así que me podía permitir un día de descanso.

Llegué a casa cansada y subí directamente a mi habitación. Me senté en mi escritorio y empecé a escribir otra carta más. Ayer me había llegado su respuesta pero trabajé hasta tarde y no me dio tiempo ni a escribir ni a mandársela.

- ¿Con quién te escribes tanto? - mi madre abrió la puerta interrumpiendo mi escritura.

- Es el proyecto que te comenté, el amigo por correspondencia - le contesté girando la silla y mirándola.

- ¿Ya sabes sobre él? - me preguntó curiosa cruzandose de brazos.

- Si y además viene de España - le contesté eso, sabiendo que al escuchar la palabra España a mi madre se le pondrían los ojos de bolilla.

- ¿Entonces estará bien posicionado?

- Si - mentí para que me dejara en paz. Por sus cartas pude percibir que Jack llevaba una vida sencilla, sin muchos lujos.

Mi madre me miró pensativa y después sonrió cerrando la puerta y dejandome sola en la habitación.

Suspiré y seguí escribiendo.

***

Para Jack:

No sabes la de veces que me he acordado de ti en lo que llevo de día. Tienes razón respecto a lo de que esto es una droga. No podía dejar de pensar en escribirte.

Menos mal que el bicho malo nunca muere. Tu has iluminado un poco mi patética vida y si te mueres volvería a ser la misma monotonía de siempre. Creas o no el que reciba cartas tuyas me hace tener una pequeña ilusión ¿Te pasa también?

No, no puedo cogerme helado gratis, me despedirian. Y por lo que veo a ti te gusta corres el riesgo.

Sheyla es un nombre muy bonito, ojalá pudiera conocerla algún día. Se ve una chica dulce y buena. Seguro estarás orgulloso de ella.