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🌎 Capítulo 33

SANDRA

Hacia varios días que Jack no contestaba mis mensajes y ni siquiera me escribía cuando últimamente me hablaba todos los días. Le escribí varios mensajes pero no les llegaban. Empecé a preocuparme y a pensar en que quizás le haya pasado algo malo.

Miraba el móvil esperando algún mensaje alguna señal de vida por su parte pero después de dos horas no obtuve respuestas.

No podía dormir, daba vueltas en la cama intentando conciliar el sueño, pero no había manera. La ansiedad estaba volviendo y mis ganas de vomitar eran cada vez más grandes. Me levanté corriendo hacia el baño y me apoyé en el lavadero mirándome en el espejo.

Tenía que respirar por la boca ya que por la nariz sentía que el aire entraba cada vez menos. Las nauseas eran cada vez más grandes y por fin eché líquido. Lo único que tenía en el cuerpo, porque no había comido nada en todo el día.

Jack no era así, no se iría sin decirme antes que ocurre. El no abandona a los que quiere. ¿Le habrá pasado algo? ¿Se habrá enamorado de otra y no sabe como decírmelo? ¿Por qué se va sin decirme nada? ¿Acaso no he significado nada para él en todo este tiempo? Mi mente daba vueltas en círculos haciendo que me tuviera que sentar en el suelo del baño, apoyando mi espalda en la pared.

- Jack... - pronunciaba su nombre en alto volviendo a mirar el móvil. Pero nada.

No podía llamar a nadie ya que eran las cuatro de la mañana y todo el mundo dormía. Intenté tranquilizarme y pensar en positivo.

- Quizás está ocupado con el trabajo o se le ha perdido el móvil, seguro que volverá - dije mientras me levantaba y me tumbaba en mi cama mirando hacia el techo.

Mis ojos se llenaron de lágrimas porque ni yo misma me creía esas palabras.

Volví a encender mi teléfono y escribí a Andy, pero no contestó. Le escribí a Sheyla preguntándole si sabía algo de su hermano o si por lo menos estaba bien pero tampoco contestaba.

- ¿Lo has llamado?

Erick era el único que estaba despierto.

- Si, varias veces en estos últimos días
y no me dice nada, no sé nada de él.

- Quizás ha tenido algún problema pero estoy
seguro de que volverá.

- Estoy muy preocupada, necesito saber de él.

- ¿Has probado enviarle cartas?

Las cartas. Aún tenía su dirección en el sobre de las antiguas cartas que me escribía. Podía mandarle una para saber si de esa forma sabría de él.

- No lo había pensado, pero voy a escribirle una.

- Ahora será mejor que descanses, tienes que relajarte.

- Créeme, ni aunque quisiera podría estar relajada.

Dejé de escribirle y agarré un folio junto a un bolígrafo. Me senté en la cama y empecé a escribir.

Para mi Jack:

Cariño, he decidió escribirte esta carta porque hace varios días que no sé nada de ti. No contestas mis mensajes ni llamadas. Le escribí a Sheyla pero tampoco sé nada. No sé lo que está pasando pero me tienes preocupada. Tu no eres de los que se va sin antes dar una explicación.