Mi corazón latió muy fuerte. Estaba celosa?.
—Señorita Ela, ya llegamos al colegio —dijo Gabriel. Respiré profundo y lo vi mirándome por el retrovisor.
—Gracias Gabriel —dije abriendo la puerta. Me bajé con mi pantalón ajustado, mi enorme camisa y la gorra de Archie. Caminé lento porque ya no tenía ganas de entrar al salón. Pero ya me encontraba allí y mi comportamiento debería ser maduro y no infantil. Subí las escaleras y cuando me disponía a entrar una mano tomo la mía. Me giré rápidamente y vi el rostro de Gadea. Parecía molesta y triste. Miro mi camisa desdeñosamente y luego a mi.
—No creas que te saldrás con la tuya. No podrás casarte con él si aún me ama. No vivirás en paz sabiendo que en su corazón solo está otra mujer —dijo ella moviendo sus manos con indignación.
—Que? —pregunté.
—No dejarás que te toque sabiendo que con esas manos ya tocó todo mi cuerpo. Si eres inteligente lo dejarás en paz —dijo cuando Neit la interrumpió.
—Hey Gadea cuánto tiempo —dijo haciendo que ella mirara hacia el.
—Ugh, tú ni me hables perdedor —dijo ella mientras daba la vuelta para irse. Él comenzó a reír. Estaba molestándola.
—Ela —mencionó haciendo reverencia. Sonreí. Era el primer chico del equipo que mencionaba mi nombre o hacia un acercamiento así.
—Que pasa aquí ? —preguntó su voz ronca a mis espaldas. Neit me giró hacia Archie y posó su brazo por encima de mi hombro.
—Nada, aquí teniendo una conversación con la única chica del equipo —dijo Neit mirando a Megan que tenía la mano agarrando el brazo de Archie.
—Gadea vino a decirme que dejara de coquetear con su prometido —Archie frunció el entrecejo. Megan me miró de los pies a la cabeza.
—Pues no crees que deberías dejar de coquetear con su prometido? —preguntó Megan. La sangre comenzó a hervirme. No me importaba que Archie amara a Gadea, no quedaría mal frente a Megan.
—Quien te pidió una opinión?. No es mi culpa que su prometido quiera casarse conmigo —dije mirándola a los ojos. Sus labios se fruncieron en frustración. Archie comenzó a reír.
—Como puede mi novia coquetear con otro —se escuchó detrás de Megan y Archie. Este último apretó la mandíbula y los puños.
—Coqueteas con otro pero tienes novio? —preguntó Megan haciéndome quedar mal frente a todos los que estaban en la entrada del salón. Tenía coraje y ahora se unía Maxton.
—Tienes novio? —preguntó Archie descaradamente. Fruncí el ceño.
—Que hacen aquí?, todos adentro —gritó el entrenador. Todos comenzaron a caminar pero Archie se quedó de brazos cruzados mirándome. No se movió hasta que Megan lo jaló. Entramos al salón y el entrenador repasó dos o tres jugadas antes de gritar que todos saliéramos. Megan salió junto a Archie que ni siquiera me miró. La puerta se cerró y respiré profundo queriendo gritar. Caminé hasta el carretón y lo hale. Tomé la nevera llena de hielo para subirla cuando la puerta se abrió.
—Necesitas ayuda?—pregunto. Me giré y vi a Maxton parado en la entrada.
—No y menos de ti —dije con indiferencia volviendo a girarme para subir la nevera al carretón. Su pecho se pegó a mi espalda insolentemente y un escalofrío recorrió mi cuerpo. De pronto hacía calor y olía a sangre. Sus manos se posaron en mi cintura y me puse nerviosa.
—Porque estás brava conmigo? —dijo acariciando mis caderas y muslos. Me giré de inmediato y lo empuje.
—Pensaste que podías estar conmigo mientras te acostabas con otras ?—pregunte. En realidad no quería que me contestara, solo quería que la pregunta se quedara en el aire. Él comenzó a reír y se acercó. Su semblante cambió por completo y parecía un lunático. Me tomó con fuerza de la cintura y me pegó a su cuerpo.
—No sería divertido?—pregunto.
—Suéltame —grité. Mi cuerpo comenzaba a temblar de miedo. Maxton me tomó de la nuca y pegó sus labios con los míos. Comencé a hacer fuerza para escapar pero su agarre era fuerte y me estaba lastimando.
—Hey suéltala, Maxton que haces?—gritó un chico. Maxton me soltó cuando el chico lo jaló hacia atrás. Comencé a llorar y el chico le propinó un puñetazo a Maxton.
—Neit —grité. Maxton comenzó a sangrar por la nariz. Su mano derecha tocó la sangre y la miró. Neit corrió hasta mí y me abrazó. Maxton comenzó a reír cuando Archie apareció desconcertado. Miro a Neit abrazándome y luego me miró a mí.
—Eres una zorra. Como pude pensar que podría llegar a acostarme contigo —dijo Maxton enojado.
—Eres un cerdo, tus sucias manos solo me provocan náuseas —grité. Archie miró a Maxton y apretó los puños.
—Te tocó?—pregunto sin mirarme. No contesté. El nudo en mi estómago subió a mi garganta impidiéndome hablar. —Pregunté que si te tocó —gritó esta vez.
—Si —contestó Neit. Archie comenzó a golpear a Maxton mientras este reía.
—Archie basta—gritó el entrenador mientras este enfurecido golpeaba a Maxton. —Basta —gritó nuevamente esta vez logrando separarlos. Mis lágrimas bajaban por mi rostro pálido. —De nuevo ustedes, que es lo que está pasando?. Neit te les unes tú también?—pregunto Cosbo molesto.
—Solo defendí a Ela. Cuando la vine a buscar Maxton intentaba tocarla indecentemente —dijo Neit seguro. El entrenador me miró y miró a Maxton. Archie respiraba con dificultad y estaba segura que si el entrenador no hubiera llegado a tiempo lo mataba. Estaba muy asustada.
—Maxton a dirección —dijo firme. —Se acabó tu contrato con el equipo—. Él no opuso resistencia si no que camino fuera del salón. Archie se acercó a mí y Neit me soltó. Él me estrechó en sus brazos y besó mi coronilla.
—Perdóname, perdóname por no haber estado aquí —dijo suspirando. —Gracias —dijo mirando a Neit. Este se rio débil.
—No podemos quedarnos sin la chica que nos entrega el agua —dijo gracioso. En ese momento me sentí a salvo. En los brazos de Archie no temblaba de miedo. Era una sensación diferente. Era reconfortante.
—Le coqueteas al prometido de una chica, tienes novio y ahora le coqueteas a Archie?—dijo Megan de brazos cruzados en la entrada del salón. Me moví incómoda en los brazos de Archie. Estaba dispuesta a arrancarle la cabeza. Archie me sostuvo fuerte y se giró para mirar a Megan aún conmigo entre sus brazos.
—Te voy a pedir que dejes de referirte hacia mi prometida de esa manera tan hostil—dijo Archie dejándonos atónitos a mi y a Neit. La cara de Megan valía oro.
—Prometida?—pregunto con semblante desdeñoso.
—Ela pronto será la señora Bennet así que pido respeto para ella —contestó tomándome de la mano para salir de allí.
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Del odio al amor hay un balcón o un violín?
Novela JuvenilEla y su familia se mudan a una nueva ciudad. Casa nueva, colegio nuevo, vida nueva y muchos problemas. Descubre que su vecino forma parte del equipo de pelota de su nuevo colegio. Su padre ambicioso quiere casarla para hacer negocios. Pero podrá El...