CAPITULO 8

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Nos encontrábamos en un punto medio entre el Santuario y el Reino, así se hacía llamar otra comunidad en la que mi esposo había emboscado para recibir suministros

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Nos encontrábamos en un punto medio entre el Santuario y el Reino, así se hacía llamar otra comunidad en la que mi esposo había emboscado para recibir suministros. Como era de esperarse mi esposo le había pedido a Gavin que me llevara con ellos. Y así lo hizo, estábamos de pie recargados en los coches que trajimos para recibir los suministros. Usualmente solían darnos frutas, una cantidad de frutas adecuadas, el Reino cultivaba sus propias frutas y verduras, lo cual por una parte agradecía y por otra me sentía bastante terrible. 

Gavin chiflo cuando dos camionetas se estacionaron frente a nosotros, Jerry la mano derecha del líder fue el primero en bajar y presentarse frente a nosotros, Dianne se puso a su lado, conocía a todos, no era la primera vez en venir.

-Amigos- saludo el líder bajando con su glamurosa chaqueta y bastón- Niña Lizzie.

-Rey Ezekiel- sonreí  saludando al mayor, Gavin golpeo mi brazo con su codo- Ezekiel- corregí-

El mayor de rastas sonrió ampliamente, se hacía llamar Rey Ezekiel aunque siempre decía que ese apodo se lo habían puesto su gente y por que tenía una mascota, un tigre, así es, el hombre tenía de mascota a un tigre que agradecía que no lo trajera a estas reuniones. 

-¿Hacemos esto rápido?- Gavin señalo la camioneta-

-Richard- ordeno Ezekiel. Ese hombre nos odiaba por completo y era entendible después de todo lo que hacíamos- 

Richard saco la caja de madera llenas de fruta y camino hasta nosotros, estaba dispuesto a entregarme la caja pero Jared, se puso delante de mi con esa estúpida sonrisa de superioridad para arrebatarle la caja pero me puse alerta cuando Richard no la soltó, una guerra de miradas comenzó entre los dos sujetos. 

Gavin me tomo del brazo e hizo que retrocediera, claro, la esposa del jefe no podía ser lastimada si no, acabarían muertos. Sonaba irónico cuando ese mismo jefe mandaba a unos de sus trabajadores a golpearme o a encerrarme durante días en una de sus celdas. 

-Richard- llamó Ezekiel con firmeza- entrégales la caja, no queremos problemas. 

-Con gusto- respondió Richard soltandola-

Pero conocía a Jared y era un completo estúpido, cuando el hombre soltó la caja, Jared se la entregó a David y al girarse le planto un puñetazo en la nariz al sujeto quien tambaleo cayendo al suelo. El reino y el Santuario sacaron sus armas apuntándose mutuamente menos Gavin y Ezekiel, Gavin se puso delante mío y levanto su mano para tranquilizar la situación. 

-Jared regresa al coche- ordeno mirando al sujeto- ¡JARED!- el de pelo largo bajo el arma lentamente, nos dirigió una mirada y una sonrisa sarcástica para levantar las manos en son de paz y hacer lo ordenado- ¡Todos, regresen al coche!

Cada uno regreso a su respectivo coche. Gavin giro para ver a Ezekiel. 

-Mismo día, misma hora, misma cantidad- el Rey asintió, Gavin me tomo del brazo para encaminarme al coche-

SKYFALL ~RICK GRIMES~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora