Inspirada en la serie de televisión "THE WALKING DEAD"
Lizzie trata de buscar a su hija topándose en el camino a Rick y a su grupo. Sin saber las consecuencias que le esperan.
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Carl se fue a la casa para cambiarse, la hora para la fiesta que daría Deanna se acercaba y aunque yo no estaba entusiasmada por eso, mi hija Maggie si, la niña brincaba de un lado de la cama a otro esperando que Enid sacará un vestido acorde para comenzar a vestirse. Arrullaba a Judith en mis brazos sacándole los eructos con varias palmaditas en su espalda. Desde el día que llegué aquí pude notar como Maggie había tomado la relación de Enid y ella como si fuera su hermana.
-¿Qué opinas de este?- Enid se dio la vuelta con un vestido azul cielo, en el pecho tenía varias piedritas de plástico que lo hacían lucir, no muy abajo de las pantorrillas-
-¡Es divino!- grito mi niña con una sonrisa, le arrebato el vestido de las manos de Enid y salió corriendo al baño-
Reí un poco al verla de esa manera. Enid sonrió, y esa fue la primera vez que la vi sonreír desde que la conocía. Cuando desvió su mirada hacía mi, la apartó rápidamente volviendo a guardar dos chamarras que había dejado en la cama al buscar el vestido.
-Enid- la llamo, la chica mira sobre su hombro- Se que Maggie te dijo la verdad- cambio a la bebé de brazo- y te agradezco por estar ahí cuando ella te necesitaba.
-Cuando conocí a Aleksander me di cuenta que Maggie le tenía miedo. Y aunque pensaba abandonarlos- su mirada conecto con la mía, esperando que algo malo saliera de mi boca y mi rostro- me quede por ella, me quede por como me hubiera gustado que se quedaran conmigo.
No quería mirarla con lastima, sabía lo que se sentía que la gente te mirará así pero ahora lo entendía, no te miraban de esa manera por que quería, no podían evitarlo. Como yo en estos momentos, así que la aparte.
-No tienes que huir más, -sonrió de lado- no si lo quieres.
-Ahora no- niega, la niña cierra el closet recargando su espalda en el-
-Genial- sonrió ampliamente, no esperaba que me dedicará una sonrisa pero cuando lo hizo, mi corazón dio un vuelco -
Dos toques en la puerta llamaron nuestro atención, pude notar como se ponía en guardia saliendo de la habitación para ir al baño donde había ido mi hija, la sigo sin perder ningún detalle.
- ¿Maggie?, sigue vistiéndote, estoy aquí afuera, ¿Okey?- da dos toques en la puerta con sus nudillos escuchando el "Okey" de mi hija-
Mil preguntas aparecen en mi mente a su reacción. Estábamos en un lugar seguro o eso era lo que decían, y si ella había estado más tiempo aquí que yo, sabía absolutamente todo.
-Iré a ver quien es- digo con el ceño fruncido- ¿Puedes cargarla?- la adolescente asiente extendiendo sus brazos hacía mi para cargar a Judith-
Bajo las escaleras despacio mirando a través del vidrió de la puerta, suelto un suspiro retenido al ver a las mujeres detrás de el. Sonrió al ver a la muchacha que no había visto hace un rato.
