𝐓𝐑𝐄𝐂𝐄

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Tirado en aquel hotel donde me había estado quedando, mi mánager siguió diciendo que tenía que regresar lo más pronto posible, pero a mi me importaba aquella chica, después de todo, era mi promesa.

Una llamada entrante comenzo a sonar por mi celular, puta madre.

─¿hola? ─hable contestando la llamada y viendo de quien se trataba.

─Alex, Juan dijo que la próxima semana hará stream con varios streamers y quería invitarte también. ─hablo del otro lado de la llamada.

no estoy seguro de estar ahí. ─dije un tanto desanimado.

─te escuchas cansado ¿esta todo bien? ─cuestiono la chica.

─si Ari, todo bien gracias. ─agradeci.

bien pues, tengo que irme a arreglar un par de asuntos. ─explicó.─hasta luego quackity. ─sin más, terminó la llamada.

Deje mi celular por un lado de la cama, estaba pensando un par de cosas, como por ejemplo los grandes rumores de twitter al no prender por 2 semanas, pinche twitter, pura funa.

Me levante por fin dispuesto a ir a aquel hospital, tendria que donar sangre, después de todo era mi trabajo todo lo que estaba haciendo.

Mientras caminaba pedi un taxi, el auto que había rentado para 1 semana se había acabado, según mis cálculos solo duraría eso en Monterrey, pero no.

Otra llamada entró, mire de quien se trataba, trate de no mostrar mis nervios y conteste.

─¿ey, que tal? ─salude.

nada de que tal, necesito que consigas todo lo que te pidan. ─fue lo primero que dijo. ─a lo que veo aún no tienes los donantes y necesitas buscarlos. ─pidio, mis nervios subieron.

si, ya los conseguí. ─afirme aunque yo sabía que no tenía ni una puta idea como iba a hacerlo.

Colgué la llamada y mi pánico comenzo a crecer, necesitaba buscar ayuda pero ¿en quien?

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Dolor, era lo que estos días sentía, me desperté por fin con un dolor inmenso en mi cuello, estaba en una habitación mayormente blanco junto un par de monitores a mis lados.

Quise mover mi cabeza pero no podia, tan sólo con respirar dolía todo mi cuello, ¿que pasaba?

Lo último que recordaba era aquel señor con una navaja y Alex llegando.

En eso entró una enfermera sacandome de mis pensamientos.

─buenos días señorita _______─saludo entrando, yo solo sonrei. ─tomare sus signos y después en un momento más vendré a preparar todo para los donantes de sangre. ─aviso y mi sonrisa se borro, ¿donantes?

Sin más la enfermera me sonrió para tomar mis signos rápido y se fue, me sentía sola, algo triste, probablemente Alex ya se había ido.

La enfermera entró de nuevo pero esta vez me entregó mi celular.

─un chico pelinegro dijo que te lo entregará ayer por la tarde. ─se acerco y me lo dio.

─gracias.─fue lo único que pude decir y solo me sonrió para salir de la habitación.

Prendí mi celular solo para ver la hora 10:23 a.m. para distraerme un poco me puse a jugar un videojuego desde mi celular.

(...)

Pasaron las eternas 3 horas cuando entró la enfermera.

─bien, todo está listo señorita, ya tenemos todo preparado para la donación. ─entraron con más utensilios y comenzaron a conectar aquella aguja sobre mi vena del brazo.

Un ardor comenzo a aparecer, veía toda la sangre ingresar sobre mi vena, sinceramente era un dolor que llegó a un punto en el que pudo ser soportable por fin.

Según a lo que había escuchado solo me pondrían poco, lo que yo necesitaba eran algo llamado glóbulos rojos.


(...)

Después de aquella implementación de sangre estaba acostada esperando a que viniera mi 'visita', hasta que llegó aquel pelinegro de gorro.

─hola.─sonrei al verlo.

Últimamente sentía unos sentimientos diferentes hacia el, era como si todo se fuera de mi mente solo con estar cerca de él.

El de acerco y se sentó en un pequeño espacio de la camilla donde estaba con una sonrisa.

─hola.─saludo ya estando ahi. ─escuche que ya te pusieron la sangre. ─rio un poco.

─más bien fue algo que se llama glóbulos rojos, sinceramente nose para que sirva. ─rei un poco.

─ah osea que me andas diciendo pendejo. ─bromeo y mi sonrisa de borro.

─yo no dije eso. ─explique.

─era broma nini.─dijo al ver mi reacción y solo sonreí, después solo hubo un pequeño silencio. ─¿no tienes hambre? ─pregunto de repente.

─un poco, voy despertando hace unas horas así que no tanto. ─dije y el asintió.

─¿que quieres de comer? ─pregunto y pensé un poco.

─no lo se, lo que sea. ─dije y el rodo los ojos con una leve sonrisa.

─bien, te traere unos tacos bien chingones. ─dijo.─ahorita vengo, te prometo que te van a gustar. ─dijo y rei, el se levantó y se fue.

Salio de la habitación aunque yo me percate que su celular se cayó en mi cama.

─¡espera tu celular! ─grite aunque no me escucho.

Me pude percatar también que estaba desbloqueado y llegó una notificación de mensaje.

➡︎𝚆𝚑𝚊𝚝𝚜𝙰𝚙𝚙
𝐎𝐬𝐯𝐚𝐥𝐝𝐨 (𝐦𝐚𝐫𝐢𝐚𝐧𝐢𝐭𝐚): nombre mien, ya me imagino el dolor de cabeza de esa morra, ya deja ese pinche compromiso.

Mire lo que decía aquel mensaje, ¿a que 'morra' se refería? Y luego... Se rompió mi corazón al ver de quien se trataba.

➡︎𝚆𝚑𝚊𝚝𝚜𝙰𝚙𝚙
𝐎𝐬𝐯𝐚𝐥𝐝𝐨 (𝐦𝐚𝐫𝐢𝐚𝐧𝐢𝐭𝐚): y luego ese apodo todo mierda, 'nini' JAJAJA, pinche apodo culero, no me imagino su nombre la neta.

¿Yo era un dolor de cabeza? ¿Pero porque a ese tal Osvaldo le hablaba mal de mí y conmigo era diferente? ¿Acaso solo lo hacía por conveniencia? Pero ¿a que?





𝑳𝑨 𝑷𝑹𝑶𝑴𝑬𝑺𝑨 𝑫𝑬𝑳 𝑨𝑴𝑶𝑹  (☯•Quackity × tu•☯) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora