Stella
Había despertado a mi hora habitual, solo que aun no me he levantado de la cama.
Tenerla aquí, junto a mí, en la misma cama, parece un sueño irreal.
Hace años que había olvidado esta imagen, había olvidado lo bien que me sentía al tenerla aquí, junto a mí.
No tengo idea de cuanto tiempo llevo observándola, pero se que no me cansaría de hacerlo. Lo preciosa que se mira durmiendo tranquilamente.
¿Y si...?
Me acerque lentamente a sus labios, pero me detuvo al escuchar una pequeña risa, una sonrisa se formo en sus labios.
―¿Estás...? ―no me dejo terminar
Sus labios atraparon los míos y sin excepciones me dejé llevar, al separarnos vi esa característica sonrisa suya.
―¿Estabas despierta?
―Buenos días ―murmuro antes de volver a besarme
―Buenos días ―comente cortando el beso
―No llevaba mucho despierta ―me pego más a ella, para poner su cabeza en mi pecho―, sentí tu mirada, pero no quise despertar, aunque si me estaba desesperando porque no te acercabas ―solté una risa ante esa confesión
―¿Por qué no te acercaste tú?
―Te espere toda la noche que me quede dormida, lo justo es que me besaras tú
―Lo siento, la charla con mi padre se extendió un poco
―¿Un poco? ―reí cuando llego a mi altura― Tardaste más de cuarenta minutos
―Ya estoy aquí ¿no? ―negó para acostarse a mi lado
―Disculpa por invadir tu habitación y quedarme dormida
―Descuida, se lo cansada que estabas
―El partido de ayer estuvo agotador ―bostezo mientras pasaba la mano por su cara―, luego el favor de Emilia con las chicas ―fruncí el ceño―, el baño me rindió después de todo
―¿Qué favor?
―¿Mande? ―me miro
―Dijiste que le hicieron un favor a Emilia ―no me miro― ¿Qué favor?
―Ah, algo ahí con las chicas
Mi teléfono sonó indicando un mensaje, lo tome mientras veía con curiosidad a Eliza.
Layla: Si ya estás despierta para que bajes a desayunar
Stella: Dile a mamá que ponga un plato extra
Deje el teléfono de lado y me pare de la cama para ir al baño, después de lavarme la cara y hacer todo lo necesario regrese a donde Eliza estaba.
―Baja para desayunar ―deje un beso en sus labios―, no vuelvas a salir por la ventana, baja cuando estes lista
Me detuve antes de salir ante su mirada, tenía una sonrisa en el rostro.
―¿Qué?
―Ese beso si me tomo desprevenida ―sonreí para luego salir de mi cuarto
Una vez que llegué a la cocina vi a mis padres charlando con mi hermana.
―¿Eliza va bajar a desayunar?
¿Cómo sabe? Ah, cierto, el mensaje que le envié a Layla.
―Sí, viene en un rato ―mire la alacena― ¿Todavía hay café? ―mire a mis padres, mamá frunció el ceño antes de mirarme, papá igual me miro extraño
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Una última partida
Teen FictionEliza Jones y Stella Lambert son el prototipo de: "personas correctas en el momento equivocado", pues sus vidas habían coincidido en preparatoria, cuando estaban empezando a descubrir su sexualidad, pero, por cosas de la vida lo de ellas no se pudo...