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CALUM

No había sido consciente de lo mucho que había estado anhelando besarla de nuevo. En los días en que no la vi, después de habernos besado, sólo podía pensar en lo mucho que necesitaba verla. Durante una fracción de tiempo, me intenté convencer que sería algo que se me pasaría, pero cuando me descubrí revisando las fotos de su Instagram antes de dormir, supe que sólo estaba engañándome. La extrañaba y no podía dejar de contar las horas hasta volverla a ver.

La forma en la que me siento con respecto a ella continúa sorprendiéndome. Aunque trato de comprender las sensaciones que me inundan cuando pienso en ella o la veo me sigue pareciendo algo complicado. Sigo sin entender por qué siento la necesidad de saber todo sobre ella y de querer estar todo el tiempo con ella.

Nunca he sido un chico que se sienta cómodo siguiendo las reglas y quizá por eso disfruto de la adrenalina de actuar a escondidas. La emoción que me invade cuando llevo a cabo situaciones arriesgadas con ella, como besarla afuera de su casa, es indescriptible.

Pero también existe la necesidad de protección que se hace presente de vez en cuando. La necesidad por hacerla sentir protegida, escuchada, cuidada me conflictúa. Nunca antes me había sentido de esta forma por nadie más. Quizá por eso siento que debo cuidar esto que ha comenzado entre nosotros y mantenerlo entre ella y yo.

Mantenerlo privado me parece algo fundamental en este momento. No porque tema que las personas noten todo lo que ella me está haciendo sentir, sino porque primero quiero terminar por entenderlo yo mismo antes de permitir que los demás lo hagan por mí. Y también porque he aprendido a leer a Hayley. Aunque ella no lo diga explícitamente, sé que se preocupa por los demás (especialmente por Luke) y, aunque a mí realmente no me importa, soy consciente de lo que su mejor amigo significa para ella y quiere evitarle un disgusto.

La sensación de los labios de Hayley sobre los míos me llena de felicidad. Sonrío mientras dejo que sea ella quién lleve el ritmo, sintiéndome afortunado. Mis manos yacen en su cintura mientras intento pegarla más a mí. Ella sonríe mientras acaricia mi cabello. Sus labios sobre los míos me resultan algo mágico haciéndome pensar que quizá nunca logre tener suficiente.

Cuando nos separamos, mantengo mi mirada en la suya mientras la fresca brisa de la noche me ayuda a mantenerme medianamente cuerdo. Me tomo la libertad de acariciar su rostro con dulzura y Hayley me sonríe como si estuviera completamente fascinada de lo que tiene frente a ella.

—Me gustas tanto —me dice colocado sus manos en mi pecho—. Gracias por esto, Calum.

—Gracias a ti —le digo bajando mis manos para colocarlas sobre las suyas— por permitirme vivir esta experiencia contigo. Me siento muy afortunado.

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Sujeto la mano de Hayley mientras bajamos las escaleras regresando a la fiesta. Aunque hubiera preferido pasar el resto de la noche a solas con ella, sabía que pasar más tiempo desaparecidos haría que las sospechas aumentaran. Cuando llegamos al piso donde está el departamento de Ashton, puedo verlo de pie en la entrada, con los brazos cruzados. Su mirada choca con la mía justo cuando entramos en su campo de visión.

—¿Se puede saber en dónde estaban? —nos pregunta mientras se acerca a nosotros, aún con los brazos cruzados.

—Fuimos a bajar a una pareja de la azotea —respondo mientras suelto la mano de Hayley—. Seguramente estaban escabulléndose para coger ahí.

Escucho a Hayley asentir ante mi excusa y Ashton nos mira con el ceño fruncido. Finalmente, después de analizarnos unos instantes, descruza los brazos y relaja su expresión.

—Sólo no vuelvan a desaparecer sin avisarme —dice suspirando—. En verdad necesito que me ayuden a vigilar que esto no se salga de control —explica señalando el interior de su departamento.

Asiento mientras le pregunto si necesita que me dirija a algún lugar en específico para ayudarlo a mantener todo medio controlado. Ashton nos dice que con que estemos caminando por todo el departamento en más que suficiente. Escucho a Hayley disculparse y Ashton le resta importancia.

Cuando nos adentramos al departamento, Ashton me toma del brazo para apartarme de Hayley. La veo alejarse y perderse entre la multitud.

—No he visto a Luke en toda la noche —me dice mi amigo haciéndome mirarlo—. Intenta encontrarlo tú antes que Hayley, por precaución.

—¿Crees que esté ebrio? —le pregunto mientras comienzo a pasar mi mirada por el lugar.

—Seguramente —me responde—. Hay que evitar que suceda algo similar a lo de hace un mes.

Cuando me aparto de Ashton, aquella incómoda necesidad de protección hacia Hayley vuelve a hacerse presente en mí. Me desato la corbata para intentar calmarme un poco mientras camino entre la multitud. Intento prestarle atención a la música que suena y saludo a varias personas.

Al no encontrar a Hemmings ni en la sala de estar, ni en el comedor, ni en la cocina, me dirijo hacia las habitaciones y un temor se instala en mí al observar las primeras habitaciones con las puertas cerradas. ¿Y si Hemmings se estaba cogiendo a alguien? Definitivamente no quería presenciar eso.

Me acerco a la primera habitación y cuando toco la manija, me doy cuenta de que la puerta está emparejada, la empujo lentamente y lo primero que visualizo es a Hemmings de espaldas a la puerta, recargado en el marco de la ventana. Está mirando hacia su izquierda y sonríe mientras asiente. Abro un poco más obteniendo la imagen de una chica pelinegra, quién mira Hemmings mientras habla.

Me apresuro a cerrar la puerta mientras logro escuchar como la chica y Hemmings intercambian opiniones sobre la estúpida serie que a él le gusta ver con Hayley. Me aparto de la habitación y miro fijamente la puerta unos segundos sin saber qué hacer con la información. Me alejo rápidamente y cuando llego a la cocina, choco con Hayley.

—Hey, hola —me dice sujetándose de mis brazos—. ¿Dónde te habías metido?

—Fui al baño —miento con una sonrisa—. ¿Quieres bailar? —le pregunto para impedir que se acerque a las habitaciones e interrumpa a Luke. Hayley asiente mientras toma mi mano y caminamos hacia la sala llena de cuerpos sudorosos que se encuentran bailando.

Mientras dejo que la música invada mi cuerpo, pienso en la escena que he presenciado. Quizá éste era el momento indicado para todo. Quizá Luke estaba comenzando a aceptar que Hayley simplemente sería su amiga, dejándome así el camino libre con ella. Quizá se me estaba presentando una oportunidad única para intentar arriesgarme con Hayley. ¿Iba a ser capaz de aceptarla o iba a salir huyendo como siempre?

Lost in Reality//Calum Hood//Nueva VersiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora