Lost in Reality//Calum Hood//Nueva Versión

5

CALUM

Aviento la mochila al sofá una vez que me encuentro en el interior de mi departamento. Suelto un bufido mientras me llevo las manos al cabello y después las llevo al frente, cubriéndome el rostro. Cierro los ojos y mantengo la posición un largo rato mientras intento calmarme. Cuento hasta tres antes de volver a abrir los ojos.

Miro a mi alrededor con desesperación, intentando alejar los pensamientos que tengo sobre Hayley. Me digo que sólo necesito ocuparme con algo antes de terminar enloqueciendo y tomo la mochila para llevarla a mi habitación, vaciarla y guardarla en el armario. Cuando abro el cierre, la sudadera verde me saluda, provocando que la preciosa amiga de Ashton se aparezca en mi mente, de nuevo. Saco la prenda y bajo la mochila al suelo para después sentarme en la cama.

Sin darme cuenta, me llevo la sudadera a la nariz. Cierro los ojos mientras el perfume de Hayley invade mis fosas nasales. Dejo salir el aire, sin apartar la prenda, aún con los ojos cerrados. Los preciosos ojos de Hayley aparecen en mi mente y mi corazón se acelera. Abro los ojos de repente, lanzando la prenda lejos de mí.

Siento mis manos y los labios hormiguearme mientras mi mirada se mantiene fija en la sudadera. De pronto, mi cerebro comienza a recordar el sueño que tuve sobre ella y me dejo caer en la cama, cerrando de nuevo los ojos. En el sueño, estábamos en mi sofá y ella se encontraba encima de mí mientras sus preciosos ojos me miraban fijamente. La había tomado del rostro para acercarla a mí y nuestros labios se rozaban, negándose a juntarse...

Me pongo de pie rápidamente y tomo la mochila del suelo. Termino de vaciarla y guardar todo en su lugar, ignorando por completo la presencia de la sudadera en el suelo. Salgo de la habitación y enciendo la televisión, simplemente para tener un poco de ruido llenando el ambiente. Recojo algunas cosas que noto fuera de lugar, sólo para mantenerme ocupado.

El momento vivido de Hayley bajando las escaleras y poniéndose a la defensiva ante mis comentarios aparece en mi mente, provocando que la sensación extraña que me ha acompañado todo el día reaparezca. Y me hace ser consciente de que, si no hubiera estado Ashton con nosotros, la habría besado en ese mismo instante.

Me detengo en seco ante la afirmación. Miro hacia el sofá que protagonizó mi sueño y me rindo. Tomo asiento mientras acepto que quizá me siento atraído hacia ella y me regaño por lo estúpido que suena eso. La chica ni siquiera se ha mostrado interesada en mí y yo me encuentro fantaseando con ella en mis sueños.

Carajo, ni siquiera sé su maldito apellido y su maldito rostro no ha dejado de torturarme desde hace dos días. Me rio mientras me digo que ahora entiendo la obsesión que tiene Hemmings con ella. La chica es preciosa y tiene un carácter increíble. No puedo evitar imaginarme llevándole la contraria sólo para hacerla enojar y después simplemente... besarla.

Me recuesto en el sofá, convenciéndome de que quizá eso es lo único que necesito. Me recuerdo que me he sentido atraído a otras chicas antes y todo se esfumó en cuanto las besé, en un intento de consuelo. Sólo necesito eso con la amiga de Hemmings. Sólo necesito besarla para que deje de atormentarme en sueños. Me lo repito un par de veces, deseando que eso sea la solución a las sensaciones extrañas que estoy experimentando.

Me pongo de pie mientras apago el televisor y camino hacia mi habitación. Al entrar observo la sudadera tirada en el suelo y suelto un suspiro agachándome para levantarla. Me la coloco para después dejarme caer en la cama. «Sólo necesito besarla y todo esto quedará en el olvido» me digo mientras el cansancio me vence.

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Miro la pantalla del televisor mientras mi película favorita se reproduce. El día había resultado bastante relajante. Me había tomado toda la mañana para lavar la ropa que tenía acumulada en el cesto de la ropa sucia y me había dado tiempo de planificar las clases que daría la siguiente semana.

Me meto un puñado de palomitas a la boca y escucho mi celular vibrar sobre la mesa de centro. Me inclino un poco, sin levantarme del sofá y visualizo el nombre de Ashton en la pantalla. Frunzo el ceño mientras atiendo la llamada.

—¿Qué quieres? —le pregunto a modo de saludo.

—También me alegra escucharte, Calum —responde mi amigo, provocando que ponga los ojos en blanco.

—Ve al grano, Ashton —le digo mientras regreso la mirada a la pantalla—. Estoy viendo una película.

—Me alegra escuchar que no estás ocupado —dice con burla haciéndome poner los ojos en blanco, de nuevo—. Alístate, me acompañarás a un concierto.

—¿A qué concierto? —pregunto sin prestar mucha atención.

—The 1975 —suelto un quejido—. A Hayley y a mí nos sobra un boleto —me incorporo del sofá inmediatamente—. El plan era ir con Luke, pero como lo arruinaste abriendo tu bocota...

—Ya te pedí disculpas —lo interrumpo—. ¿A qué hora es el concierto?

—A las 7 de la noche —me responde y sonrío.

—Está bien, iré —comento.

—¿Irás? —me pregunta Ashton confundido—. ¿No vas a poner alguna excusa o algo?

—No —respondo intentando sonar casual—. Hace tiempo que no voy a un concierto. ¿Te veo cuando salgas del trabajo?

Ashton me dice que sí y que por favor me lleve mi automóvil porque el suyo se encuentra en el taller debido a una revisión de rutina. Le digo que estaré puntual en su trabajo y cuelgo, poniéndome de pie mientras apago la televisión. Me dirijo al baño mientras una sonrisa se dibuja en mi rostro.

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Saludo a Ashton con una sonrisa cuando se sube a mi auto y él me mira con el ceño fruncido mientras conduzco hacia la salida del centro comercial. Las ventanas se encuentran abiertas, dejando entrar un poco de aire fresco al interior del vehículo.

—¿Cómo te fue en el trabajo? —le pregunto lanzándole una mirada rápida.

—Voy a ir al grano, Calum —me dice Ashton con tono serio—. ¿Por qué aceptaste ir al concierto con nosotros?

—¿No era lo que querías? —le pregunto confundido—. ¿Para eso me llamaste no?

—Aceptaste muy rápido —responde mirándome intrigado.

—Estaba aburrido en mi departamento —explico encogiéndome de hombros.

—Sólo te suplico que te comportes —me dice con cansancio—. No vayas a ser grosero con Hayley, por favor.

—Haré mi mejor esfuerzo —respondo ganándome una mirada seria por parte de Ashton.

—Hablo en serio, Calum —el tono de voz de Ashton suena como una advertencia—. Sé amable con Hayley. No le arruines el concierto.

—¿Por qué haría algo así? —le pregunto con una sonrisa divertida plasmada en el rostro para después regresar la mirada hacia el camino.