Capítulo 19

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Me encontraba de nuevo en la cabaña de Zelen, tenía noches sin tener estos sueños por lo que se me hacía raro estar aquí, caminé en dirección a la cabaña pero antes de siquiera entrar la voz de Zelen llegó a mis oídos.

-Hola pequeña – me dijo saliendo de una de las esquinas de la casa – ven, vamos a la parte de atrás.

La seguí como me dijo hasta la parte de atrás de la casa donde habían muchas más flores y una mesita junto con cuatro sillas, desde aquí se podía apreciar mucho mejor el extraño árbol de cuatro estaciones, lo que hacía ver el lugar muy hermoso.

-Cómo has estado Emma? Te has sentido bien? – me pregunta mientras tomaba asiento en una de las sillas.

-Bueno digamos que bien, y si, me he sentido bien – le respondo.

-Se que lo que estás pasando es nuevo para ti y es un gran cambio – enserio? No me digas – pero, tienes que saber que todo va a estar bien.

-Ojalá pudiera creerlo – le digo.

-Pequeña, la vida es muy complicada como para entenderla tan fácilmente, los desafíos que son puestos en nuestro camino nos ayudan a superar las cosas y a seguir adelante – que buenas palabras dice esta mujer – entiendo que dejar tu hogar, tu familia y tus amigos te asusta, pero, todo en esta vida tiene un propósito y a veces ese propósito puede ser más importante de lo que crees.

-Puedo hacerle una pregunta? – le pregunto.

-Claro querida, qué quieres saber?.

-Cree que pueda con todo lo que está por venir? – yo misma no encontraba la respuesta a esta pregunta y mis dudas eran si era la única que pensaba que no.

-Emma, no podemos vivir teniéndole miedo al futuro, nuestro objetivo es vivir el presente, aunque te caigas cien veces siempre te levantarás intentando volver a triunfar – me dice – el miedo es bueno, nos ayuda a superarnos a nosotros mismo, y el que tú tienes te hará mucho más fuerte de lo que ya eres.

Sus palabras me hicieron sentir mejor, he tenido que llevar todo lo que me ha estado pasando sola y que alguien pueda escucharme y aconsejarme de verdad que me ayuda mucho.

-Puedo hacerle otra pregunta? – ella asiente a lo que digo – Cómo conoció a Aro?.

-Lo conocí hace mucho tiempo atrás, digamos que por circunstancias de la vida, él y yo no somos muy amigos que digamos – su respuesta no era específica, pero no quería parecer grosera al seguir preguntando – él es una persona muy complicada...

-Ni me lo diga – digo irónicamentez

-Los obstáculos de la vida lo hicieron ser así, una persona fría y distante, pero como todos, esa es sola la capa que él quiere que conozcan, las personas normalmente nos ocultamos detrás de una máscara para que no puedan lastimarnos Emma.

La verdad ella tenia mucha razón al decirlo, por eso la famosa frase "No debemos juzgar un libro por su portada".

-Te sientes mejor? – me pregunta.

-La verdad es que si, gracias por aconsejarme, lo necesitaba.

-No hay de que, puedes contar conmigo – me dice.

-Gracias.

-Ah Emma, un consejo, al llegar no demuestre miedo, eso les encanta y les sube el ego.

Cuando le iba a preguntar a qué se refería desperté dando por terminado el sueño.

A qué se refería?.

****

-Te vamos a extrañar muchísimo mi pequeñita, recuerda escribirnos todos los días así sea de madrugada, cualquier cosa que pase no dude en llamarme, iré por ti enseguida, ven acá – mi mamá me enrolla en un gran abrazo.

-Nuestra pequeñita se va de la casa, esto no me lo esperaba todavía – dice mi tía triste uniéndose al abrazo.

El gran día había llegado, me encontraba despidiéndome de mi familia para partir a mi nuevo entorno.

-Las quiero muchísimo a las dos – les digo – son lo más importante que tengo – mientras terminábamos el abrazo el timbre de la casa sonó.

-Creíste que te irías sin despedirte de nosotros? – Eran mis amigos Ana y Víctor.

Mis amigos me envolvieron en un abrazo para despedirse.

-Sabes que cualquier cosa que pase nos puedes decir y nosotros te apoyaremos en todo – me dice mi amigo.

-Siempre vamos a estar para ti, te queremos – dice Ana.

-Y yo a ustedes – les doy un último abrazo.

-Em ya llegaron – me dice mi mamá avisando que ya el momento había llegado.

Afuera se encontraba el señor Benedict, pero no había ningún rastro de Aro.

-Cuídate mucho pequeña, te amamos – me despide de mi mamá y mi tía para así seguir mi camino al auto con benedict mientras mi mamá se secaba las lágrimas que había derramado.

-Está en buenas manos, no se preocupen estará bien – les dice el señor Benedict.

Benedict me ayudó a subir mi maleta al auto para así yo entrar y llevarme una sorpresa al encontrar a Aro dentro del auto.

Y yo que pensaba que me iba a dejar tranquila en el viaje y por eno no había venido.

Ilusa.

-Hola Emma – me dice sin siquiera mirarme.

Vestía su famoso traje impecable pero esta vez en su vestimenta había algo más, cargaba unos lentes negros tapando sus ojos grises, lo que lo hacía ver mucho más imponente.

No le quedaban nada mal esos lentes.

Concéntrate Emma.

-Hola – respondí de la misma manera que él, seca.

Benedict se subió al auto y emprendió el rumbo al aeropuerto mientras yo miraba por la ventana a mi pequeña familia que dejaba atrás.

-Espero hayas descansado bien porque el viaje que te espera va a ser muy largo – por primera vez en el dia se dirigía a mi.

-Bueno de no haber sido por el sueño que tuve anoche, no hubiera dormido nada.

Y era verdad gracias a ese sueño mis didus se calmaron un poco dejándome dormir mucho más tranquil.

-Sueño? Tuviste un sueño anoche? – el tono de Aro había cambiado ahora parecía sorprendido.

-Si, y es que acaso tú no eres el que se encarga de dirigir mis sueños? – por qué tanta sorpresa si él es el personaje principal de ellos? – pasa algo malo? – le pregunto mientras veo cómo sus manos se vuelven puños.

-No, no pasa nada, disfruta del viaje – su tono era más duro dándome a entender que estaba molesto.

Tras ver su reacción me di por entendido que no hablaríamos por todo el viaje, y la verdad creo que es mejor así, quería prepararme mentalmente para lo que estaba por venir y el solo me distraía.

Saqué mis audífonos y mi celular para escuchar un poco de música y hacer el viaje más ameno y rápido.

Pero antes le di una discreta miradita a Aro para encontrarlo escribiendo por su teléfono de manera muy concentrada.

Así que tiene teléfono.

Por supuesto que tiene que tener Teléfono Emma, y por donde crees que te llamo? Por telepatía?.

Cierto, así de distraída estoy como para no darme cuenta.

Para que vean lo que hacen los hombres.

Perdón.

Los sueños.

Ay no, ya me perdí.

La realidad de soñarte a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora