Li Feng, 28 años antes del presente.
Complejo de la exuberancia.
Es un hecho innegable que las cosas no salieron para nada de la forma en que cualquiera de nosotros hubiera esperado. Me atrevería incluso a afirmar que el maestro Rino se sorprendió tanto o más que los ministros cuando renuncie al trono y se lo entregue a mi hermano sin titubeos, pero después de todo y a pesar de lo impulsiva que pudiera haber sido esa decisión, ahora me siento más convencida de que fue lo mejor.
Zaho fue coronado oficialmente frente a toda la corte algunos días después del funeral, cuando los destrozos ocasionados por el asedio fueron reparados. No necesito mencionar que en medio de la conmoción ocurrida los ministros vieron la oportunidad perfecta para seguir manipulando la situación;
"El pueblo ya ha sufrido demasiado con la pérdida de su líder como para someterlos al caos y la confusión que sería la noticia de dos sucesores en tan poco tiempo, sin mencionar el revuelo que seguramente ocasionará en muchos de nuestros súbditos el enterarse que una mujer ocupó el trono de china..."; fue la excusa que dieron para ocultar mi efímero e insignificante tiempo como "emperatriz de china", evitando colocar mi nombre en los registros de la dinastía. No fue fácil aceptarlo la primera vez que lo escuché, sin embargo es un costo nulo a cambio de la integridad de mi hijo.
También tengo la certeza de que si las circunstancias les hubiesen dado la oportunidad de hacerse con el complejo que mi padre me dio para vivir dentro de la ciudad prohibida, lo habrían hecho sin dudarlo. Afortunadamente se que eso no sucederá, al menos no a corto plazo; cualquiera que haya visitado la ciudad durante su mandato está bien enterado del "gran hogar" que la princesa ostenta por orden directa del emperador Zhiqiang, así que por más que lo quieran no pueden hacer mucho en realidad para sacarme de aquí, aunque debo admitir que desde lo ocurrido durante el funeral y a pesar de las reparaciones qué se llevan a cabo en los muros qué rodean mi hogar y en los jardines, la tranquilidad de estar aquí no es la misma que hace un par de meses...
—Majestad —la voz de Yanus me saca de mis pensamientos luego de que entra en la estancia — Es casi medio día. Iré a la puerta oeste para recibir al maestro Rino, ¿Hay alguna cosa que necesites? Tal vez algo que quieras que consiga.
—Oh no... Descuida. Y... Date prisa, no sería lo mejor hacer esperar al maestro en la entrada...
—Claro —responde con una inclinación juntando puño y palma. Justo en ese momento Lina entra cargando un barreño con agua tibia. Yanus trata de no demorar mucho en el intercambio con su amiga, con quien es evidente la atracción que ambos se tienen.
Lina llegó aquí por la propia intervención de Yanus, quien luego de haberse enterado de mi estado en una charla seria (y con un par de reclamaciones) con mi esposo y conmigo en la que comprendió mejor el peligro al que lo orille a exponernos cuando fui a visitar a despedirme de mi padre, nos confirmó lo rápido que este búfalo puede llegar a actuar; sin dudarlo ni un momento se movilizó para traerla aquí como una aliada más que ayudara con los cuidados que sabía ninguno de los muchachos podía brindarme. Aunque teníamos nuestras dudas, Yanus aseguraba que podíamos confiar en ella tanto como en él. Afortunadamente ella ha demostrado que mi amigo estaba en lo cierto, y ha decir verdad es un alivio, pues con todas las tensiones a nuestro alrededor, no me había permitido un momento real para pensar de lleno en detalles tan importantes como el que llegó a obviar, tan pronto como llegó, fue ella quien preguntó si teníamos una solución para la ausencia de los paños de cada mes. Claro esta que ninguno de los chicos, se hubiesen molestado en pensar en ello. Después de darles un poco más de contexto, Lina nos recordó de manera oportuna que aunque el resto de las damas de servicio no estén involucradas en lo absoluto en el cuidado de mi embarazo, las demás chicas de la servidumbre del complejo y en especial las encargadas de la recolección de dichos paños con sangre, empezarían a especular al respecto cuando notarán su ausencia. ¿Cómo pude olvidarme de algo tan evidente?
ESTÁS LEYENDO
Sorpresas entre guerreros
FanfictionPo ha regresado al palacio de Jade después de salvar al mundo junto a la Cuchilla Errante. De vuelta en el valle de la Paz, situaciones empiezan a salir a la luz entre él y Tigresa que eran ignoradas por ellos mismos. Nuevos problemas azotaran a Ch...