Pov- Lando Norris.El ruido de la música se mezclaba con el murmullo de las conversaciones y las risas, creando una atmósfera pesada en el lugar. Las luces parpadeaban en tonos neón, reflejándose en las copas y creando destellos en los ojos de las personas que bailaban alrededor. Había algo en el ambiente que hacía que todo se sintiera un poco más irreal, como si estuviera viviendo en un sueño. Un sueño del que no estaba seguro si quería despertar.
No tan lejos de mí, vi a Nirvana riendo, su cabello rubio cayendo en suaves ondas sobre sus hombros mientras agitaba una copa de champán en la mano. Estaba rodeada de gente, y por un momento, su risa se elevó por encima del bullicio, llamando mi atención. Observé cómo sus labios se curvaban en una sonrisa que empezaba a conocer demasiado bien, esa que me decía que estaba coqueteando, disfrutando del efecto que tenía en los demás.
Me apoyé en una de las columnas, observándola desde la distancia.
Nirvana tenía una energía magnética que atraía a todos a su alrededor, y aunque sabía que podía manejarse sola, no podía evitar sentir la necesidad de mantenerla bajo mi radar. Después de todo, esta fiesta se había descontrolado un poco más de lo planeado luego de encontrarla afuera del club, y no quería que ella terminara haciendo algo de lo que se arrepentiría mañana.
Vi cómo uno de los chicos con los que hablaba se inclinaba hacia ella, claramente encantado por su atención. Ella rió de nuevo, pero sus ojos vagaron por la habitación hasta encontrarse con los míos. Su expresión cambió de inmediato. Esa chispa traviesa que apareció en su mirada, y su sonrisa se hizo más amplia.
Sabía exactamente lo que estaba a punto de hacer.
Con un movimiento casi teatral, se despidió del grupo con un gesto de su mano y comenzó a caminar hacia mí, tambaleándose ligeramente por el alcohol que ya corría por sus venas.
Mi corazón dio un vuelco, una mezcla de diversión y preocupación, mientras la veía acercarse.
—Niño bonito. —dijo arrastrando las palabras cuando llegó a mi lado, su voz más dulce de lo habitual. Se apoyó contra mí, pasando un brazo alrededor de mi cuello. —¿Por qué estás aquí, solo y aburrido? Esta fiesta es increíble.
No pude evitar sonreír.
—No estoy aburrido, Nirvana. Solo estaba disfrutando de verte disfrutar.
Ella rió, inclinándose hacia mí hasta que sus labios rozaron mi oreja.
—Oh, ¿es eso lo que estabas haciendo? Porque, para ser sincera, creo que podrías disfrutar más si te dejaras llevar un poco.
Su tono era descaradamente provocador, y el roce de su cuerpo contra el mío me hizo tomar aire profundamente. Sabía que estaba coqueteando conmigo, pero también sabía que no estaba en su estado más sobrio.
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Teardrops on my guitar | Lando Norris
FanfictionEn el glamoroso escenario de la Fórmula 1, donde la velocidad es ley y los secretos se esconden detrás de las curvas, el piloto carismático Lando Norris y la prometedora cantante Nirvana Sinclair se ven envueltos en un juego de relaciones públicas q...