--- ENTE| es un concepto filosófico que remite a lo que es, existe o puede existir. Un ente participa del ser y tiene propiedades que, como ente, le son propias.
[ myheroacademy ]
[ historia en castellano ]
...
— capítulo cuarenta y siete. (la tempestad violeta: un desafío de cinco)
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- ¡Eso no vale! ¡Ha hecho trampas!
Ante el reclamo de Mineta, su profesor se encogió de hombros, aunque por dentro sintiéndose un poco estúpido por no haberse dado cuenta de la estrategia del chico.
No pensaba que fuera a hacerlo, porque no creía que Monoma no fuera a subestimar a su alumna.
- Aunque sea algo raro lo que ha hecho, en un combate real Monoma puede copiar el don de cualquier persona que esté por allí. -musitó, a sabiendas de que el chico había hecho un plan demasiado bueno.
- Así es prácticamente imposible que Leah gane. -murmuró para sus adentros Ashido.
A su lado, una pelinegra miraba más atenta que nunca las pantallas, donde se mostraba en primer plano el panorama del último combate.
- La copia de Monoma si solo es un don puede durar hasta diez minutos. Y ya hace seis desde que cogió el quirk del profesor Aizawa. Solo debe aguantar cuatro minutos. -habló en voz alta Yaoyorozu.
Shoto y Katsuki compartieron miradas, ambos conocedores de la increíble resistencia de la chica y de su cabezonería.
Sabían que ella iba a aguantar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Miré con enfado a Monoma, dándome cuenta de que antes de empezar la prueba tan solo se había acercado a Aizawa para copiar su don.
Aunque ya habían pasado varios minutos de eso, por lo que lo único que tendría que hacer sería resistir aquel tiempo.
El mejor plan sería atacar al rubio para que así su concentración fallara y no pudiera robar mi don, pero al estar a varios metros de altura y aferrado al cuerno como si de un toro mecánico se tratara, aquello se me hacía imposible.
Una oleada de aire llegó por mi izquierda, sacándome de mis pensamientos. El chico bestia, Shishido, había usado sus garras para romper una de las muchas tuberías que inundaban el campo, lanzando diversos trozos en mi dirección.
