El silencio que había reinado en Lescatie fue destrozado en cuestión de segundos. Druella Lilim, hija del Rey Demonio, jamás pensó que su mal presentimiento se materializaría de esta forma tan brutal y repentina. Estaba tranquilamente sentada en su trono, cuando, en un instante, una tremenda explosión sacudió los muros exteriores del castillo. Las piedras cayeron en cascada, y el cielo, antes sereno, se cubrió de destellos mágicos y explosiones.
Druella se levantó rápidamente, sin tiempo para procesar lo que estaba ocurriendo. Su instinto le decía que corriera, pero el caos se desató antes de que pudiera tomar una decisión. Espadas materializadas desde el aire y bolas de magia de múltiples elementos cayeron como una lluvia de destrucción, arrasando con todo lo que tocaban. Las mamonos, sus fieles seguidoras, intentaron contener la ofensiva, pero eran superadas con facilidad por la abrumadora violencia.
Y entonces lo vio.
Un gigante de más de dos metros, con una espada colosal de piedra en sus manos, apareció en el campo de batalla. Su sola presencia provocaba una atmósfera de pura devastación. No era solo una criatura cualquiera: era el famoso Berserker, Heracles, y estaba completamente fuera de control. Su velocidad, para alguien de su tamaño, era inconcebible, y cada paso resonaba como un trueno en las ruinas del castillo.
Momentos antes del ataque, Riyo Gudako, con una sonrisa demente en su rostro, había dado la orden. En lugar de optar por la estrategia o la cautela, decidió enfrentarse de frente. Con su Heracles al nivel 120, con todas sus skills y append skills al máximo, y su craft essence exclusiva equipada, la ofensiva fue brutal y rápida. El Berserker fue el primero en recibir la orden de destruir el muro, y tras eso, el caos absoluto se desató.
Gudako, observando la destrucción con calma, sabía que el poder de su Berserker era suficiente para causar estragos en Lescatie, pero estaba preparada para mucho más si era necesario.
—Derriba el muro y no te detengas hasta que todo esté en ruinas —había ordenado Gudako con una sonrisa peligrosa.
Heracles, con su cuerpo colosal y su sed de destrucción incontrolable, obedeció sin vacilar. El muro del castillo se hizo pedazos ante su espada de piedra, y con un rugido, se lanzó hacia el interior, destruyendo todo a su paso. Druella, que había intentado escapar, pronto se dio cuenta de que estaba siendo perseguida por una máquina de matar imparable.
—¡No puede ser! —gritó Druella, mientras corría por los pasillos en ruinas, esquivando las explosiones y los destellos de magia—. ¡Esto es ridículo!
A pesar de sus habilidades, la velocidad de Heracles era sorprendente. Druella no pudo distanciarse lo suficiente, y un poderoso golpe de la espada del gigante la alcanzó, destruyendo sus alas y dislocándole la espalda. El impacto la lanzó a través de una pared, chocando contra los escombros.
Herida y debilitada, Druella apenas podía moverse. El gigantesco Berserker se acercaba para darle el golpe final, pero antes de que pudiera hacerlo, un grupo de mamono kunoichi apareció en escena. Una de ellas logró agarrar a Druella y llevarla lejos, mientras las demás trataban desesperadamente de distraer a Heracles.
Sin embargo, fue en vano. El colosal Berserker despachó a las kunoichi con la misma brutalidad que había mostrado hasta ahora. Las que intentaron enfrentarlo fueron rápidamente reducidas a cenizas y pedazos, sus cuerpos destrozados y sus órganos internos aplastados por la fuerza inconmensurable del gigante. Las agonizantes mamono quedaron tiradas en el suelo, incapaces de hacer algo más que gemir en su desesperación.
YOU ARE READING
¡QUIERO MAS SAINT QUARTZ!
Humor¿que tan lejos ira riyo gudako para conseguir saint quartz para el gacha? pues destruira un mundo donde solo hay depravacion para conseguirlos poco importandole los que sean inocentes.