En los años antiguos, los Omegas eran considerados como un rango en "Peligro de extinción".Por lo que para un alfa conseguir uno era cuestión de buena suerte al ser esclavos del Rey.
Para Sunghoon, un fugitivo del Reyno, le fue fácil robar un Omega...
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La mágica y perpleja magnitud de las consecuencias vivas en los aspectos disfrazados del paso eran algo sumamente invisible, mostrado como un espejismo que estaba detrás de todos, las cosas solo eran más complejas de lo que sería llamado lo "común", oh al menos, quizás solo fuera una idea impertinente de la humanidad incapaz de entender lo que habían causado sus propios pasos y actos, sinceramente...no existían muchos años de diferencia entre el inicio y el desenlace, sin embargo, esos limitados años no eran más que una pesadilla, el lado oscuro de esta noche lunar...
Riki paso cuatro años de su vida lamentando la muerte de su esposo, renegado de su puesto como Rey que fue de pica durabilidad por no llamarlo un tiempo terriblemente efímero...encargado de una manada que cuestionaba hasta el día de hoy el fallecimiento de su capitan, la perdida inédita de la espada de Moon y sobre todo...la razón detrás de la noche en la cual Riki bajo del caballo donde se suponía debía volver SungHoon, su líder...
Sinceramente, Niki no sabía si había hecho algo bueno de su vida en esos años, viviendo corrompido hacia HeeSeung busco la respuesta y la supuesta "sanación" para su alma, sin embargo, una vez aquel pedazo de papel estuvo entre sus manos todo se jodió nuevamente y la oscura neblina que había desbordado ahora lo consumía a el.
Era realmente una vida patética...
Sin embargo cuando Shim Sunwoo despierto esa vez en la habitación, abriendo los ojos de golpe y sujetando sus manos para conectar sus miradas, todo se sintió como si los años fueran inciertos, aquella sensación de calidad y felicidad misma que solo le otorgaba Sunoo era la misma que le daba SunWoo, no obstante, eso le aterrorizó tanto que nisiquiera podía mirarlo, su esposo estaba muerto y era un hombre que había amado a otro Omega, no había razones para disfrutar de la terrible similitud.
-Si necesitas algo, dímelo, tu presencia me incómoda grandemente -dijo Riki mientras alistaba sus maletas para irse, desde que despertó, SunWoo se la pasaba observándolo, siempre caminando un metro lejos de el e incluso comiendo a las horas que el Omega lo hacía- llevas días siguiéndome, estoy cansado así que dime qué buscas de mi.
No hubo respuesta, hacia mucho que Sunoo lo hablaba.
-Mañara será la boda real, HeeSeung y SungHoon se unirán en matrimonio así que yo partiré a mi manada una vez la ceremonia termine...
Explico Niki con una voz suave, se encontraba sentando en el balcón de su habitación y mientras sus labios soltaban humo sus mejillas enrojecian por el helado clima, había dejado la puerta habierta por SunWoo quien en ese instante se encontraba a un costado de su cama, observando minuciosamente al Omega descansar.
-Si vas a decirme algo este día es el último...
Jadeo, cerrando los ojos con cuidado para sentir la brisa, hacia frío y mucho, sin embargo eso le tranquilizaba, como si estuviera en un lugar solo para el, baldío, en silencio...en paz y frío...
