CAPÍTULO 24 - POR: Isabella Johnson

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—¿Segura que es una ponencia sobre la importancia del estudio de suelos, la que vas a dar? —me pregunta Patrick, desde el desayunador.

—Sí, ¿por?, ¿me veo mal? —le pregunto preocupada, de ser así, se me hará tarde si tengo que cambiarme de ropa.

—¡Puedes ir envuelta en un saco de patatas y te verías genial! —me responde.

—Y entonces, ¿por qué preguntas?

—¡Estás espectacular!, y vas a opacar a los demás expositores.

—¡Exagerado!, ¿no llevo exceso de maquillaje, verdad?

—No, ¡te ves linda!

—Dina —digo en voz alta para que venga.

—Dígame —me dice acercándose a mí.

—¿Qué tal se me ve el maquillaje?, ¿no me excedí? —le pregunto.

—Bastante natural como siempre, la sombra que ha utilizado le resalta el color de los ojos, eso es lo único que cambia, pero le queda muy bien.

—Ya veo que no crees en mí —se queja Patrick, haciéndose el ofendido.

—Eres muy adulador, y ya ni sé cuando dices las cosas en serio, o solo porque me ves con amor.

—Y cómo evitarlo —responde acercándose a mí y dándome un beso, Dina ya se ha regresado a lo que estaba haciendo.

—Piensas quedarte a comer con el grupo, o quieres escabullirte a mi oficina —me ofrece sonriente.

—Me encantaría escabullirme contigo, pero tengo la sospecha de que peligro en convertirme en tu almuerzo —le respondo, adivinando sus intenciones.

—¡Mal pensada!, solo preguntaba para mandar a preparar algo delicioso.

—Eso como postre, ¡es delicioso! —le respondo, él se pone a reír.

—¡Mujer insaciable! —se queja.

—¡Cayá!, ¡van a escucharte! —lo regaño.

Y el muy bandido se ríe aún más.

Durante dos días se desarrollará una jornada de arquitectura, orientada a construcciones en armonía con el medio ambiente, en la que se espera tener la participación de socios, aliados estratégicos, y entes reguladores del rubro.

El evento va a realizarse en el hotel Hill, y agradecí que hayan cambiado, porque en un inicio habían propuesto el Ramfort y a ese lugar no se me antoja entrar.

Llegamos al hotel y después de despedirnos con Patrick, cada quien toma su camino, me dirijo al salón en donde se realizará el evento, cuando ya he saludado a algunos conocidos, voy a mi asiento según la numeración, al presentarse el momento de mi ponencia, ¡lo hago con mucho entusiasmo!

A la hora del almuerzo me quedo aquí a compartir con el grupo, pero en cuanto tengo un espacio me escabullo para buscar a Patrick, Clary no está en su escritorio, por lo que entro de una vez en el despacho de él, está tan concentrado en los documentos que revisa, que ni cuenta se da cuando entro.

Sigilosamente, llego hasta adonde él y en cuanto me ve se sorprende, cerrando y haciendo a un lado el documento que leía, desconozco si por casualidad o a propósito lo ha dejado boca abajo, así que no pude ver de qué se trataba.

—¡Que grata sorpresa! —exclama levantándose para abrazarme, me lleva hasta el sofá y se sienta ahí conmigo—. ¡Finalmente si lograste escaparte!

—Sí, me costó cruzar media ciudad para venir a verte, pero aquí estoy —le respondo sonriendo—. ¿Ya almorzaste? —le pregunto.

—Se me pasó el tiempo, ya voy a pedir que me traigan algo, ¿y tú ya comiste?

El DESTINO Y SUS JUEGOS - ¿GANARÁ EL AMOR?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora