Reyes Demonio

Ellos quieren llevarme

Fue algo impresionante, muchos de los maestros y el director del jardín que pasaron un poco de tiempo en aula de los mellizos, observando el comportamiento de los niños y demonios. Sakura estaba contenta, el par de niños se veían más animados y enérgico que nunca; cuando normalmente permanecían sentados y un poco agotados. Justo ahora estaban en el receso y Haru corría detrás de uno de sus compañeros, todo era calma. El director veía a los demonios, mientras que Blake, miraba a Haru desde la rama de uno de los árboles cercano, Snow sonreía suavemente al ver a Sama jugar con una pelota. Los maestros también detectaron que los gemelos no se alejaban demasiado del demonio, ya que cuando llegaban a cierta distancia se detenían y regresaban a donde estaba su familiar, Haru se sentaba debajo del árbol en el que estaba Blake, mientras que Sama simplemente se sentaba en el regazo se Snow, quien la envolvía con su cola en la niña.

Tal y como había dicho Hinami a la hora de la siesta, ambos niños se sentaron en regazos de los demonios a dormir.

A la hora de la salida, los demonios no esperaron la llegada de nadie antes de tomar a los mellizos salir del lugar, con ellos cuidándolo, no había necesidad que Hinami los recogiera.

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Kouji estaba feliz, era el primer día que iría a la escuela desde que conoció a su hermano, no pudo venir antes porque su hermano le había dicho que se mantuviera cerca de Saki, pero que durante unos días él no se iría, por lo cual debía mantenerse en casa con el zorro, el cual era un pequeño zorro grisáceo, hasta la noche anterior que desapareció en su sombra, y luego reapareció a la hora de dormir, aunque el único que durmió fue él mientras que el zorro solo se acostaba al pie de su cama mirando por la ventana la noche.

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¡Oye, Kouji! ¿Por qué no viniste? _ interrogó uno de sus compañeros, estaban en uno de los juegos del patio de la escuela a la hora del receso.

Estaba pasando la semana con Saki, me lo dio el novio de mi hermano _ dijo el pequeño pelinegro.

¿Tienes un hermano? _ los chicos vieron los ojos de su amigo iluminarse, mientras asentía.

Mi hermano es tan genial, es mayor que yo; se había ido cuando era más joven, pero volvió, papá dice que era un pandillero, y me va a enseñar usar magia _ dijo animado el niño, los ojos de los otros niños se abrieron como platos.

¿Puedes hacer magia? _ interrogó uno de los niños, y Kouji asintió.

No sé cómo convocarla a voluntad, ya que no permiten que enseñen magia fuera del centro, pero nii-san dijo que me enseñaría _ dijo el pelinegro mientras daba la espalda a sus amigos, quienes fruncieron el ceño. El niño de ocho años sintió como era empujado al suelo pelándose las rodillas.

¡¡Oye!! _ regañó el pelinegro a sus amigos mientras se volvía para verlos, y se sorprendió al verlos enojado.

¡Deja de decir mentiras! _ reprendió uno de sus amigos.

No puedes ir por ahí diciendo que tienes magia, mentiroso _ dijo otro, Kouji miró a sus amigos sorprendido, luego uno de ellos pasó por su lado pisando su mano.

Kouji pudo sentir a su familiar removerse en su sombra, pudo sentir la sensación de calidez que le daba la presencia de Saki volviéndose más agresiva y caliente.

¡¡¡NOO!!! _ le gritó al demonio, el cual retrocedió, luego Kouji miró a sus amigos _ yo no miento _ dijo, y justo en ese momento una grieta apareció frente a los niños, dando paso a un enorme demonio con cuernos, y grandes garras.