El amor, es una porquería y el que diga lo contrario, miente o tal vez yo miré mal, o simplemente escogí el equivocado.
Mi nombre es Esperanza, tengo 28 años, y hace 10 años que estoy comprometida con el doctor más prestigioso y amado por todos Darwin Marshall .
Bastardo, arrogante, pero malditamente hermoso.
Un imponente hombre de 1,90 ojos verdes pelo castaño, musculatura imponente.
Podía ser lo que el quisiera, las mujeres les llovian, su familia era de prestigio, su familia venía de la medicina, y eran los mejores, y la más respetada.
Mi familia era de el rango de abogados, tenían el mejor bufet de abogados, y mi familia y la suya eran amigos de toda la vida, bueno también estaban la familia de el amor de su vida Brisa Hampton, rubia hermosa ojos azules, parecia modelo de revista, todo lo que una mujer puede soñar.
Amiga de la familia también, pero mi familia también la quería como una hija, es la mejor amiga de mi hermana y mis hermanos la adoran, yo soy la menor.
Todo aquí eran familias la cual eran y son imponentes, mis hermanos mayores están casados, somos bastantes hermanos, mi familia es numerosa y la de ellos también, por eso la exigencia que se pide es grande.
Cada uno respeta la profesión de su familia, y la verdad que con eso se ha podido mantener a los que son ahora.
Pero hay un problema yo, si yo no soy parte de los estándares que ellos exigen, y peor aún no pueden creer que este aún comprometida y mi supuesto prometido no quiera saber nada con la boda.
Si soy el asme reír de mi familia y la suya, y peor aún a él parece no importarle.
Para rematar vivimos juntos, pero les cuento algo, jamás pasó nada entre nosotros y si eso se sabe por qué, jamás mencioné nada, pero ustedes saben todos se dan cuenta.
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LO SIENTO.. QUERIDO DOCTOR!
RomantikHacía 10 años que estábamos comprometidos, nuestras familias, se unieron por temas de negocios. Mi prometido, y el amor de mi vida. Ese hombre lo ame desde pequeña, pero el jamás me amo, sus ojos iban para su primer amor, tal fue así que retraso el...